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jueves, 22 de noviembre de 2007

Las neuronas de los nacionalistas

Las neuronas de los nacionalistas

Oriol PujolPosted Octubre 30th, 2007 by Jesus Clemente Polo
29 octubre 2007

En su estreno como “flamante portavoz de CiU en el Parlament” (El País. 27 de octubre 2007), el Sr. Oriol Pujol hijo del ex-President de la Generalitat Sr. Jordi Pujol, manifestó sin sin despenarse “cualquier nacionalista, en alguna neurona de su cerebro más o menos escondida, retiene la opción de la independencia de su país.” La declaración del Sr. Oriol Pujol abre una nueva línea de investigación muy prometedora en torno a una cuestión crucial para la política catalana, sujeta hasta hoy mismo a la incertidumbre de no saber si las pulsiones independentistas eran fruto de una reacción de los pobladores autóctonos contra la dominación romana, de la pérdida de influencia ocasionada por centrar la expansión territorial del condado en el Mediterráneo en lugar del Atlántico, del fracaso cosechado por la nobleza catalana al tomar partido en favor del archiduque Carlos, del conservadurismo de los empresarios locales más preocupados por retener mercados que impulsar la independencia, del desorden revolucionario que dio con el proyecto secesionista al inicio de la guerra civil, o, en fin, de las elevadas dosis de calçots con salsa de romescu que se han incorporado a la dieta local en las últimas décadas.
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En todo caso, las perspectivas que abre esta declaración resultan apasionantes y las preguntas que suscita a buen seguro mantendrán ocupadas a las mentes más preclaras del nacionalismo catalán. ¿En qué parte del cerebro están localizadas las neuronas que “retienen la opción de la independencia”? ¿Se activan estas neuronas -que bien podrían llamarse protoindependentistas- por sí mismas, o se precisa que el sujeto receptor asista a dos o tres celebraciones de la Diada? ¿Y, por qué algunas neuronas se esconden, se inhiben e hibernan como si la cosa no fuera con ellas? ¿Se transmiten de padres a hijos de modo que los descendientes de un matrimonio Pujol-Ferrusola tienen más neuronas de este tipo que los provenientes de la unión Rodríguez-Sarasola? ¿Cuántos centenares de neuronas protoindependentistas se requieren para que una persona se afilie al PSC, a CiU o a Esquerra Republicana? ¿Cabrá en el futuro realizar trasplantes para aumentar la intensidad de las pulsiones independentistas de la masa neuronal? ¿Poseen también los emigrantes este tipo de neuronas? ¿Podrían las técnicas recombinantes alterar la bandera-país de estas neuronas? No me cabe duda de que los futuros Departamentos de Neurología Nacionalista de las Universidades catalanas pondrán en marcha con gran rapidez programas de investigación para responder preguntas tan cruciales para el futuro político de Cataluña.

Lo cierto es que desde que el Sr. Arzallus diera tanto que hablar con sus referencias al RH negativo que singulariza la materia nuclear de los antropoides universalmente conocidos como “vascos y vascas”, no había registrado el panorama político un seísmo de tal intensidad. Artur Mas y Felip Puig, Secretario General y Secretario General Adjunto de Convergencia Democrática de Catalunya, respectivamente, han sin titubeos las palabras del Sr. Oriol Pujol, mientras que el Sr. Duran, líder de Unió Democrática de Catalunya, marcaba distancias en una conferencia dictada ante un foro de empresarios en Tarragona. Vale la pena reproducir sus palabras: conozco “personalmente” a empresarios –dijo el líder de Unió- que frenarían sus planes para Cataluña en el caso de que se planteara una consulta sobre la autodeterminación. En otras palabras, al Sr. Durán no le agrada la idea de celebrar una consulta sobre la autodeterminación, no porque considere que valga la pena mantener unido lo que unido lleva más de 500 años, sino porque la secesión de Cataluña no sale a cuenta y … la pela es la pela. De todos modos, el Sr. Durán debería andarse con mucho cuidado pues su calculada oposición al secesionismo radical, la doctrina oficial de la actual cúpula de Convergencia, bien pudiera acabar con sus huesos en algún Departamento de Neurobiología Nacionalista para que se determine con toda objetivada la suerte de mal que aqueja a sus neuronas.

Y cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar. Hubo un tiempo –recordarlo hoy casi produce añoranza- en que lo políticamente correcto era definir como catalán a todo aquel que trabajaba y vivía en Cataluña. Debilidades del pasado hoy ya superadas gracias al avance de la ciencia nacionalista. Hoy se afirma sin rubor en Cataluña que nacionalista o catalán -que viene a ser lo mismo para un nacionalita-, es sólo aquel cuyo cerebro posee neuronas capaces de retener la opción independentista. Y si hasta el Sr. Durán i Lleida puede acabar siendo sospechoso por tibio y apocado en lo tocante a este asunto, cuanto más no lo seremos quiénes estamos abiertamente en contra de la secesión de Cataluña, y en contra de la secesión de España, y en contra de la secesión de Europa? ¿Qué harán con nosotros en Cataluña cuando se compruebe que no hay alojada en nuestro cerebro ni una sola neurona, ¡ni siquiera una pequeñita y escuálida!, portadora del maravilloso elixir de la independencia? Me temo que nos prohibirán hasta donar desinteresadamente nuestros órganos por temor a que pudieran acabar contaminando a algún catalán sin mella. Quizás pues, amigos, ha llegado el momento de organizarnos en serio si queremos contrarrestar los efectos del cada día más agresivo espíritu tribal, pueril y xenófobo, que destilan las neuronas de los políticos nacionalistas.

miércoles, 26 de septiembre de 2007

La cadena del odio

Muchas son las cosas lamentables que hemos visto últimamente en nuestro país, amenazas de muerte contra políticos, quema se símbolos constitucionales, aumento de la violencia callejera entre otras. Estos actos representan a un claro ejemplo de lo que es el fascismo en toda su expresión. Se da la paradoja que dichas acciones provienen precisamente de aquellos que luego nos llaman fascistas a los que no pensamos como ellos. Este tipo de incidentes ya se está convirtiendo en algo cotidiano que crece en notoriedad y gravedad. Quizás mucha gente cree que esto es algo banal o sencillamente se ponga de perfil porque cree que no va con ellos. Pero lo cierto de todo esto es que manifiesta un desmembramiento del marco constitucional que tanto y tanta sangre a costado. Lo peor de todo, es que la mayoría de estos actos quedan impunes, y dan la sensación que en este país se puede hacer de todo sin que pase nada, sin que la justicia ni la policía actúen.

Son varias las cusas que han propiciado esta situación en nuestra sociedad. Una de esas causas, es sin duda alguna, el adoctrinamiento prodigado por una serie de políticos profesionales y a la vez completamente irresponsables, que han dejado una impronta de la cual empezamos a sufrir las consecuencias. Estos niños que una vez fueron a las escuelas dirigidas por estos energúmenos, que nunca han tenido un criterio claro de lo que representan los valores de la convivencia y la democracia y que no han tenido unos padres que les hayan enseñado a pensar por si mismos, son ahora jóvenes adolescentes cegados por el odio. Odio a todo lo que aquello que le han dicho, directa o subliminalmente, que es malo y opresor. Para ellos somos los enemigos de la nación catalana, los antipatriotas vascos, los monárquicos recalcitrantes, los españoles invasores o los fascistas. Tantos años moldeando las mentes de los jóvenes, controlando los medios de comunicación, tergiversando la historia, arreglando los libros de texto en las escuelas, en definitiva, sembrando el odio; comienzan a producir sus envenenados frutos. No difiere mucho esta situación de las que generan cadenas de odio que pueden terminar en tragedia.

Esta ultima legislatura, dirigida por Rodrígez Zapatero, en nada a contribuido a mitigar este problema, sino más bien todo lo contrario. La ley de memoria histórica, la reforma educativa para implantar la educación por la ciudadanía, estatutos que rompen el principio de igualdad y cuartan la libertad de las personas, la negociación con los asesinos de ETA y su silencio cuando se producen actos que atentan contra la monarquía o políticos que no son de su signo, hacen pensar que este presidente nuestro, no solo no es un defensor de nuestro sistema constitucional, sino que le gustaría romperlo. Lo curioso del caso, es que nada de lo que está haciendo venía en su programa electoral, no ha manifestado su republicanismo, ni su intención de desmembrar el marco constitucional. Seguramente, si lo hubiese hecho, otro gallo le hubiese cantado.

En estos últimos días de su legislatura y atendiendo a las sagradas encuestas, vuelve a su disfraz de cordero. Las nuevas campañas publicitarias acaban con, el ya típico, GOBIERNO DE ESPAÑA. Una solución mezquina para que no se vean sus verdaderas intenciones; pero sus actos lo delatan y esperemos que las gentes que pretenden vivir en libertad no se dejen engañar por su apariencia de niño bueno.

Sinceramente, a mi no me parece mal la república o que alguien la defienda, al fin y al cabo ambos sistemas son loables. Tanto la monarquía parlamentaria como la república, pueden perfectamente representar la voluntad popular. Lo que me molesta y mucho, es que algunos políticos, que se les ve el plumero, no manifiesten abiertamente sus ideas, y que estos mismos políticos vayan tirando piedras al sistema establecido y votado por la inmensa mayoría del pueblo que gobiernan, para luego volverse a poner el disfraz de defensores de la patria.

jueves, 30 de agosto de 2007

Vivir más rápido o vivir más

La carretera se ha convertido en los últimos tiempos en una de las causas de muerte o incapacitación grabe. A pesar de las mejoras técnicas en los automóviles, las vías de tránsito y el endurecimiento de las sanciones de tráfico, no se ha podido evitar que la cifra de muertos no deje de crecer.

Si tenemos en cuenta que, tan solo en Europa hay 450 millones de vehículos circulando por los más de 4700000 kilómetros de carreteras, no es de extrañar que esta cifra de muertos no descienda, más bien parece un milagro que no haya más muertos.

Desde la aparición del automóvil, allá por el año 1933, este artefacto se ha convertido parte inseparable de nuestro modo de vida. Su aparición y su posterior fabricación en serie dio a algunos un nuevo significado a la palabra libertad. Muchos jóvenes lo utilizaron como su primer nido de amor y otros como símbolo de ostentación. Pero sobre todo, el automóvil marcó la línea que separaba el antes y un después en los desplazamientos de los seres humanos; algo que ya había ocurrió anteriormente con el ferrocarril. La gran diferencia frente a éste, es que el automóvil no necesita de un maquinista experto para ser conducido, sino que es su propietario quien lo conduce, sea un experto o no.

El ego del ser humano, como siempre, puede equivocar la visión de lo que es necesario y útil o un estúpido gasto innecesario y caro. Esto ha hecho que el automóvil se haya convertido, en muchos casos, parte de la indumentaria del poseedor del mismo; algo que la industria del automóvil ha explotado sin ningún reparo. Deportivos, lujosos, todo terreno, de diferentes colores y tamaños, hay uno para cada preferencia, para cada necesidad de ensalzamiento del ego personal de cada uno. No importa que un hummer consuma 18,4litros a los 100, aquel que lo lleva piensa que es rentable, porque todo el mundo se lo queda mirando a su paso.

Pero la verdad es que el automóvil no es más que una máquina. Una máquina que contamina, ya no solo por que consume combustibles que envenenan el aire que respiramos, sino para que circulen se deben construir infraestructuras que se abren camino a través de nuestros bosques, nuestras montañas y todo aquello que se cruce en su camino.

La sociedad de consumo y el consumismo ha hecho del automóvil algo más que una máquina que nos permite desplazarnos al lugar de trabajo o a realizar la compra, ha convertido esta máquina es un símbolo de ostentación y poder. Buena prueba de ello es lo que sucede a muchos de nosotros, sobre todo a los hombres, cuando nos ponemos a los mandos de nuestro vehículo. Nos volvemos agresivos, intolerantes y pensamos que somos los mejores conductores del mundo; por ello nos vemos con capacidad de criticar cualquier fallo, por mínimo que sea, de los demás conductores; que dejan entonces de ser personas para convertirse en conductores de otros vehículos, rivales en potencia.

¿Que extraña magia tiene este artefacto que nos cambia tanto cuando ponemos las manos en el volante?

¿Cómo es posible que alguien, normalmente tímido, ponga su equipo de música a todo volumen y se pasee con su vehículo con las ventanillas abiertas por las calles de su pueblo o su ciudad para llamar la atención?

Las respuestas a estas preguntas y a otras relacionadas con las actitudes irracionales que tomamos frente al volante, son muy difíciles de contestar. Seguramente haría falta todo un tratado de psicología para comprender porque se producen estas reacciones. Quizás la publicidad, utilizada durante mucho tiempo para vender coches, tenga la respuesta. Pero es posible también que esta publicidad solo haya explotado las debilidades que ya existían en los compradores de vehículos; así que la cosa no está nada clara.

Otro ejemplo de actitudes irracionales a la hora de usar del vehículo privado, es el uso que hacemos de él, muchas veces innecesario. Tan solo un ejemplo: Cinco kilómetros de distancia pueden ser cubiertos en poco menos de veinte minutos a pie o diez en bicicleta si se va dando un paseo; pero seguramente, para cubrir esta distancia, bien sea por comodidad, o por que hemos comprado el coche para algo, hacemos uso de él. Dependiendo de la zona y las circunstancias del tráfico, es muy posible que nos encontremos con un atasco, o que al llegar a nuestro destino no encontremos un sitio para aparcar, con lo que podríamos tardar más tiempo en realizar este trayecto en coche que andando, y todo ello contaminando y gastando un dinero que bien nos podría haber servido para tomarnos una cerveza bien fría después del paseito. Seguramente serán muchas otras las ocasiones en que podremos andar o elegir otro medio de transporte y optamos por el vehiculo privado. Pero toda la culpa de que obremos así no es enteramente nuestra.

A parte de las campañas de publicidad, nuestro ego y poca racionalidad en el uso del coche, una buena parte del uso indiscriminado del vehiculo privado en nuestra sociedad actual la tiene los estados. Es evidente que si se promoviera un transporte público de calidad y barato, muchos dejaríamos el coche en el garaje. También son responsables de este uso muchas empresas y sus políticas de personal, completamente insensibles a la conciliación de la vida laboral con la familiar. Muchos de los trabajos que realizamos hoy en día, gracias a los avances en la informática y las comunicaciones, podría efectuarse desde casa, sin necesidad de desplazarse a las oficinas más que en contadas ocasiones. Por suerte, este tipo de trabajos empieza a proliferar, ya que resulta rentable, tanto para el trabajador, como para la empresa.

La muerte o una grabe incapacitación física, pueden ser la consecuencia de nuestro empecinamiento en el uso intensivo del coche y una utilización inconsciente del mismo. Pero aunque seamos buenos conductores, prudentes en la carretera, y utilicemos el coche lo mínimo necesario siempre nos podremos encontrar con una señalización deficiente, un reventón o un conductor que no es como nosotros. Nos podemos encontrar en la carretera, por ejemplo, con vehículos conducidos por personas que no han tenido que pasar un examen de capacitación; como son los conductores que conducen microcoches, estos no necesitan carné de conducir para ser conducidos, sin embargo, ocupan prácticamente el mismo espacio que un coche normal, y pueden circular por vías donde se va a más de noventa kilómetros por hora. Sin duda un ejemplo más de una política irracional a la hora de legislar sobre el tráfico. También podemos ver como en muchas ocasiones, las leyes que sancionan y reprimen a los malos conductores, se quedan en nada por falta de medios. Mientras por otro lado somos multados por rebasar en diez kilómetros por hora la velocidad máxima permitida en una autovía donde había un radar colocado en una enorme recta de tres carriles. Quizás esto, como conductor, haga que nos planteemos que intereses se persiguen a la hora de disponer estos dispositivos en la carretera, si se ponen para ser recaudadores del estado o para evitar accidentes.

Con todo lo dicho, espero haber removido la conciencia de los conductores para que piensen dos veces si en algunas ocasiones merece la pena coger el coche o dar un pequeño pase. Hay que plantearse si merece la pena vivir más rápido o vivir más tiempo.

miércoles, 22 de agosto de 2007

¿Así de sencillo?


Así parecería creerlo Hugo Chávez. ¿O fue más bien un deseo, proferido en tono de murmullo, esa expresión que concluyó con el artículo que, a hurtadillas, propone la elección interminable, que no indefinida, para el cargo de Presidente de la República? Hugo Chávez, con esa forma casi tímida de plantearlo, nos está pidiendo que no nos detengamos en esto, que, al fin y al cabo, es una minucia cuando la vemos a la luz de ese país glorioso e increíble que él tiene en su alocada fantasía.

Pero, realmente, ¿es tan así de sencillo? ¿Es que habla en serio? ¿Es que cree que la vida -y la historia que se despliega con los días- de un país es cuestión de unos cuantos artículos de una Constitución de la que, después de todo, él ha sido su mayor violador, su gran depredador? ¿Lo cree de verdad? Más aún, ¿cree que él es el hombre para semejante tarea, para obra tan ciclópea?

¿Se siente Hugo Chávez un Mahoma, un Genghis Khan, un Pedro el Grande? Ellos figuran en el escogido club de los hombres que realmente tuvieron tal incidencia en sus pueblos que, a partir de ellos, y desde ellos, esas sociedades presentaron unos rasgos que desconocían hasta la aparición en escena de su eficaz liderazgo.

Ojo, que cuando digo unos rasgos, me quedo allí y no voy más allá, ni prodigo ditirambo alguno. En efecto, la distancia entre lo que estos hombres pretendieron y lo que permaneció luego de su desaparición, es grande. En algunos casos, ¡bien grande! Para quien lo dude, que vea hoy qué son los pueblos mongoles y con calma contemple la Rusia actual. A lo mejor y fue sólo San Petersburgo la obra duradera del zar Pedro. Vaya usted a saber.

Aquellos hombres tuvieron mucho, pero mucho más poder que el que Hugo Chávez podría tener nunca y aún así hubieron de desplegar todo tipo de habilidades políticas para labrar los consensos y coaliciones que les garantizarían ese poder y algunas de las reformas que pretendían lograr.

Nunca dependieron de un recurso natural cuya fortaleza colgara del favor de sus enemigos y jamás fueron dispendiosos con lo que tenían a mano. Sabían que no hay lealtad ni alianza más frágil que la que se compra. Más aún, sospechaban que es como el chantaje, que con el éxito se torna voraz. Si no, observen a los recipiendarios de adentro y de afuera: ¡insaciables e ingratos!

Cambiarle a los venezolanos su idea sobre la propiedad. O peor, ponerla en manos de gente del Gobierno, porque eso es lo que, en definitiva terminará siendo; cambiarles su geografía político-administrativa; inventarles unas fulanas ciudades socialistas en las que se les confinaría; montarles un papá-Estado que los vigile día y noche y encima, como gran regalo para todos: ¡un Presidente eterno! Bien difícil. Y bien alejado de lo que este país ha sido siempre. Por fortuna.

En esa obra magna, ésa que lo hace imaginarse a sí mismo como un titán de la historia, Hugo Chávez tiene que despreciar -y dejar de lado- lo único que los venezolanos quieren en este momento: no ser asesinados cualquier tarde en cualquier vereda y el ahorrarse ver cómo, en sus mismas narices, unas minorías de bandidos se pavonean con sus petrodólares por cualquier aeropuerto extrañamente descuidado.

¿Y el Presidente? Bien, gracias. Viendo pa'otro lado. Para su lado, que es el único que le importa.

No hay, ni ha habido, ni habrá hombre -o mujer- de Estado que pueda sostenerse en el poder, en el real, el efectivo, desoyendo los continuos pedidos de la población. Estar de espaldas a lo que la gente realmente quiere y pide es una receta para el desastre. Aunque para llegar al suyo ese hombre de Estado lleve a su nación al mayor desastre, como el bandido de Robert Mugabe en Zimbabwe. Dentro de poco, lo que él generó se lo llevará por los cachos.

Al mismo tiempo, no hay hombre o mujer sobre cualquier tierra que esté dispuesto a ser llevado y traído de aquí para allá, a ser expoliado por una pandilla de malvivientes, a ser objeto de mofa cínica por un gobierno burlón, a cambio de nada. Más temprano que tarde dirá, ¡hasta aquí y hasta hoy! Ta'bueno ya.

El tiempo corre para este "fundador de pueblos" y la paciencia de la gente se agota। No habrá promesa absurda para un mañana imaginario que la pare, ni Proyecto fantasioso que posponga su ira. Cuando llegue el día de las facturas ni lo abrumado que su cuantía y magnitud les pongan detendrá su cobro. En el entretanto, es hora de responder y a todos nos toca burlar esta trampa de las oferticas y apuntar a lo esencial. Y lo esencial es: ¡No a la reforma!

Antonio Cova Maduro

miércoles, 25 de julio de 2007

Algo se está moviendo en la política española.

Gracias a un grupo de intelectuales y sus manifestaciones públicas se consiguió movilizar y concienciar a muchas personas de la necesidad de cambiar las cosas en la política española. Fruto de ese movimiento social nació Ciudadanos, un nuevo partido político que obtuvo en su primer enfrentamiento con las urnas y tan solo con algunos meses de vida representación parlamentaria. Todo ello con escasos medios y sin poner en juego las inmensas fortunas que derrochan los grandes partidos en sus campañas, y a pesar del silencio informativo, de los continuos ataques de los partidos nacionalistas y de algunos periodistas; que llegaron a decir cosas tan diversas como que era un partido de extrema derecha financiado por la FAES. A pesar de todo eso, Ciudadanos consiguió tres escaños en el Parlamento de Cataluña cerca de noventa mil votos .



Sin duda, este evento evidenció la gran necesidad que tiene la ciudadanía española de un cambio de rumbo en su política, la necesidad de una alternativa a la fauna que nos gobierna.

Por desgracia para muchos que tenían sus ilusiones depositadas en este proyecto, Ciudadanos a caído en muchas de las costumbres que han arrastrado durante demasiado tiempo los otros partidos, aquellos que desfrutan de su eterno limbo particular. La fuerza, la argumentación y la necesidad del proyecto no bastaron para evitar que se hayan producido en su seno disensiones, luchas internas por el poder e irregularidades significativas. Cabe destacar a su favor, que estas cosillas no hubiesen salido a la luz si este no fuese un partido diferente, si no fuese mucho más transparente que otros partidos, cuya opacidad no deja ver, más que en contadas ocasiones, toda las porquerías que hay en su interior. Aunque en contra partida, la nueva oficina de prensa del partido, deja ver nuevamente actitudes propias de partidos ya consolidados. Las recientes declaraciones de sus dirigentes y las notas de prensa intentando minimizar los daños, me vuelven a recordar a las mentiras de los políticos de poca monta, que en vez de admitir los problemas intentan taparlos o minimizarlos, como si lo que importase solo fuese la imagen porque es lo que vende votos. La sinceridad en la política es un bien muy escaso del cual adolecen los dirigentes de Ciudadanos. Con lo fácil que hubiese sido contar la verdad ¿O no?



Por fortuna para todos Ciutadans o Ciudadanos, como se llama ahora, solo es el principio de un movimiento social emergente. En este mismo momento una nueva formación se está gestando, y por lo que parece no tiene intención de caer en los mismos errores que Ciudadanos. La nueva formación, al igual que Ciudadanos se está extendiendo por la red, creando debates y afinidades. Son gentes de diferentes ideologías, al igual que Ciudadanos al principio tiene un objetivo claro, y esa será su fuerza.

La lógica evolución de estos movimientos sociales es que converjan en uno solo, tarea ardua y difícil, pero posible. Sería un gran hito histórico para esta, nuestra pequeña parte del mundo, disponer de una formación política capaz de dejar atrás la hipocresía, el populismo y la demagogia; males endémicos de de nuestra clase política actual que ha provocado un total alejamiento de la sociedad de sus políticos y de la política en general. Son actitudes que han hecho pensar a las buenas gentes de este país que la política es cosa de unos pocos privilegiados burócratas que solo se preocupan de ellos mismos y no de resolver sus problemas de cada día.

sábado, 14 de julio de 2007

Ideario para una nueva sociedad humana

Ideario para una nueva sociedad humana



Preámbulo:

Este proyecto nace con la intención de proponer una nueva sociedad basada en el sentido común, la ética y los derechos fundamentales del ser humano. Estos derechos fundamentales se detallan en la Declaración Universal de los Derechos humanos, firmada en las naciones unidas en el año 1948. No obstante, consideramos que estos derechos son imposibles de aplicar en el marco político mundial actual, basado en unas políticas territoriales desiguales y una sociedad cada día más inmersa en el consumismo. Así mismo consideramos que la sociedad humana no puede prosperar y evolucionar agrediendo en su expansión al el entorno que la sostiene, es decir, la Tierra y todos los seres vivos que habitan en ella.

  1. Naciones o ámbitos de derecho constitucional.

    La actual distribución política del planeta provoca desigualdades de derechos y descoordinación de políticas esenciales para en desarrollo de la sociedad humana. Los estados no contribuyen con sus decisiones a la distribución equitativa de los recursos del planeta, ni evitan la destrucción y degradación del patrimonio natural. Las naciones o estados son, por tanto entidades obsoletas. Tal y como las conocemos ahora., son entidades autónomas, independientes y desligadas, casi totalmente, unas de otras en sus decisiones. Son, sin embargo, un marco jurídico y constitucional que protege muchos de los derechos aludidos en la declaración de derechos humanos, como son , también, un órgano de gobierno que mantiene el orden y la justicia. Por lo que no deben ser desestimados, sino modificados en su estructura para que se conviertan en la parte cercana de un estado o supranacional que coordine todas las políticas que a tañen a la humanidad y su desarrollo.

  2. Cultura y hechos diferenciales

    Considerando que todos los hombres son iguales ante la ley, es cuanto menos una desfachatez pensar que un estado debe preservar esa diferencia. La cultura no es una diferencia excluyente entre humanos, es un tesoro común a todos los seres humanos. La preservación de la memoria histórica, la cultura, las artes y todas aquellas cosas que pestañeen a un grupo determinado de humanos debe ser difundida y preservada. Pero no deben ser los estados los encargados de esta tarea por el condicionante excluyente que eso plantea con otros estados.

    Los idiomas son un medio de comunicación entre humanos. Pueden ser un distintivo de la región del mundo en la que se ha nacido, pero en ningún caso un hecho diferenciador, tampoco un distintivo político. El conocimiento de varios idiomas es una riqueza cultural que debe fomentarse, al igual que la elección del idioma en que se desee adquirir conocimientos.

  3. Democracia y libertad.

    La democracia sería un sistema perfecto para decidir el destino común de los colectivos humanos, si no fuese porque para ello sería necesario que todos y cada uno de los participes en ella estuviesen preparados para ejercer el voto.

    Actualmente, una elección democrática se ha convertido en un espectáculo circense donde cabe prácticamente todo. La demagogia, la mentira, el engaño y el espectáculo mediático, forman parte de las artes perversas que se utilizan para influir en la decisión del votante. Estas artes se han convertido en la herramientas habituales de la clase política. Estas prácticas so tendrían efectividad si cada uno de los individuos tuviese la formación necesaria. Para que esto sea posible a medio plazo, es necesario primero poner las medidas adecuadas para eliminar las malas artes en la política, aumentar el grado de debate y participación en dichas elecciones. Adecuar las leyes electorales para hacer que los resultados sean fieles a las decisiones de los votantes y sobre todo, es necesaria una educación que permita al individuo discernir cual el la mejor opción para todos.

  4. Educación

    La educación es el pilar básico del desarrollo humano. La enseñanza no debe ser más que el conocimiento puro de las ciencias humanas, alejadas de cualquier dogmatismo o creencia. Debe ser, por tanto, aséptica en cuestiones de fe o política o religión. Debe incluir la ética como valor supremo, el el respeto a los demás y a la tierra como eje fundamental. Debe formar a la persona para tener criterio propio y hacer posible su autosuficiencia intelectual. La educación debe ser gratuita y accesible a todos. Porque es la mayor y la más rentable inversión que un estado puede hacer.

  5. Políticos o funcionarios públicos

    Uno de los males endémicos de la política es el poder que otorga a los que deberían ser defensores de lo público. Este poder no se produce tan solo a nivel individual, sino en los colectivos que forman partidos políticos de una y de otra ideología. El simple echo de la imposición de unas ideas sobre otras da esa sensación embriagadora de poder. Esto no ocurriría así si alcanzar un cargo público no representase poder, sino responsabilidad. Actualmente cualquier persona puede alcanzar cargos de responsabilidad política sin tener un mínimo de preparación ni ética. Las consecuencias de esto se hacen notar en el alto grado de corrupción a nivel local y de ineptitud a la hora de tomar decisiones y elegir asesores. Los mecanismos de control para el acceso a cargos de responsabilidad deben de ser severos e intolerantes contra la las personas que han demostrado no ser validas por su gestión o decisiones.

  6. Estado del bienestar

    El grado de felicidad de una persona no se define en términos monetarios ni de posesión material. Un ser humano puede ser feliz teniendo lo más básico y elemental para vivir. El modelo de sociedad que hemos creado no contempla este hecho. La actual sociedad de consumo promueve la idea de que tanto tienes tanto vales. Esta idea que esta enquistada en la la mayor parte del mundo occidental, va ha provocar que a corto plazo va la situación social del mundo sea insostenible. Y lo será por el simple hecho de que todos los seres humanos quieren alcanzar el estatus de la sociedad occidental; y eso es completamente imposible, ya que la tierra no tiene tantos recursos. Un ser humano que haya recibido una educación acorde a su capacidad intelectual, que pueda formar una familia, desarrollar una actividad profesional acorde con sus aptitudes y deseos, tener periodos de ocio y descanso suficientes y un lugar para vivir que cubra todas sus necesidades elementales, tiene más probabilidades se ser feliz y sentirse realizado que un ser humano que se haya enriquecido a costa del trabajo de los demás. Es precisamente la tarea de un gobierno responsable, con sentido común y un concepto ético de la sociedad hacer que esta situación cambie.

  7. Natalidad y familia

    La familia es la célula básica de relación afectiva del ser humano. No obstante, esta célula familiar no debe tener una estructura determinada por la leyes, pues la naturaleza del ser humano puede ser caprichosa y una sociedad justa debe respetar esas diferencias y crear un marco jurídico adecuado para contemplar todas las posibilidades de relación familiar.

    Por otra parte la posibilidad de tener hijos debe ser consecuente con la circunstancias de nuestro habitad. La población mundial no puede crecer hasta hacer peligrar nuestra existencia o la de las generaciones venideras. Es tarea de los científicos determinar cual es el número de seres idóneo para habitar la Tierra, de forma que: Todos los seres humanos tengan la posibilidad de ser felices en ella, que existan espacios que preserven y mantengan la flora y fauna de la Tierra, para mantener de esta manera el frágil equilibrio biológico del planeta.

    Así mismo es tarea de los gobiernos controlar y mantener de forma responsable el número de seres humanos del planeta.

  8. Sociedad de la información

    Una de las bases del conocimiento es la información. La información supone estar informado de todo cuanto acontece en la sociedad, sin restricciones. Los avances científicos son propiedad de la sociedad humana y no de los científicos, lo cual no exime a éstos que dichos avances e investigaciones sean convenientemente retribuidas. Las patentes, aunque han supuesto un repulsivo económico para promover la investigación y la creación, también son un impedimento para que dichos avances sean mejorados y utilizados para realizar nuevas investigaciones. Por lo que hay que aplicar otras formulas de retribución para los creadores que no restrinjan el uso de los descubrimientos científicos. A la vez hay que disponer los medios necesarios para que todo el mundo tenga acceso a la información sobre dichos avances. Así mismo el acceso a la literatura, la música o el arte deberá ser un derecho, no así su posesión, narración o escucha directamente del autor, cuyas retribuciones deben de venir por esos cauces.

  9. La justicia

    La defensa de los derechos de los ciudadanos frente al estado o o otros ciudadanos debe ser rápida y eficaz. Una justicia que se dilata en el tiempo no es justicia, una justicia que comete errores, no es justicia. Todos los hombres deben ser iguales ante la ley, independientemente de su poder adquisitivo. La independencia del poder judicial debe de ser total. . Las personas que infrinjan las leyes serán internadas en instituciones penitenciarias. Estas instituciones serán centros reales de reeducación y trabajo social. Que garanticen que la salida de estos centros solo se produzca cuando el reo esté concienciado del delito que ha cometido y pagado el costo de su delito a la sociedad con su trabajo.



  1. Sanidad y seguridad social

    Una sociedad justa y solidaría no lo es si un solo ser humano no recibe todos los cuidados que pueden ofrecer los avances médicos. La sanidad por tanto, debe ser gratuita y de calidad. Cada ser humano debe tener derecho a recibir los medicamentos necesarios y los cuidados que estén disponibles, independientemente de si poder adquisitivo o condición social.

  2. Empleo y economía.

    Todo ser humano tiene derecho a ejercer la actividad o las actividades económicas que desee, siempre y cuando se cumplan tres condiciones.

    -Que tenga aptitudes y conocimientos para realizarla.

    -Que suponga un bien común par la sociedad y no perjudique a esta.

    -Y que se sienta a gusto en la realización de la misma.

    Para que estas condiciones se den es necesario que cada ser humano obtenga un mínimo de conocimientos básicos que le supongan una base para saber elegir. Unos órganos estatales capaces de evaluar las aptitudes del individuo y si la actividad es pertinente o no. Así como la posibilidad de recibir una educación acorde con la actividad elegida. También deberá tener la posibilidad de recibir, si así lo desea, una formación continuada que le ayude en el perfeccionamiento de sus aptitudes.

    Todo ser humano tiene derecho a recibir una retribución justa por su trabajo en consonancia con la utilidad social de su labor, y no con los beneficios económicos o personales que esta actividad proporcione.

    La especulación debe ser un mal a erradicar, son actividades económicas que no aportan nada a la sociedad en su conjunto; tan solo al especulador.

  3. Religión

    El crecimiento espiritual de los seres humanos es un bien para la sociedad, y como tal debe ser protegido y respetado. Sin embargo, ninguna religión puede vulnerar en sus conceptos de culto ningún derecho fundamental; ni de hombres ni de mujeres. Cualquier culto religioso que vulnere este precepto no debe ser aceptado como tal. Ningún culto religioso debe impartirse como asignatura en el sistema educativo, que debe ser completamente neutral en este aspecto, ya que se trata de una creencia personal. Sin embargo, es necesario que dichos cultos sean conocidos con un mínimo de profundidad, ya que su historia y sus conceptos forman parte de la historia de la humanidad, para bien o para mal.

  4. Ocio, entretenimiento y crecimiento personal.

    Todo ser humano tiene el derecho de disponer de tiempo libre y a utilizarlo como guste. Gracias a la robótica y la automatización de procesos productivos, la agricultura intensiva y le teletrabajo, este tiempo de libertad se puede incrementar hasta ser ecuánime con los avances mencionados. No es ético ni de recibo que todos los avances que la humanidad ha acumulado a lo largo de su historia sirvan para que solo unos pocos se beneficien de ellos.

    La televisión es un medio de difusión informativo de ocio y también puede ser un medio instructivo. Actualmente, este medio se ha convertido, salvo contadas excepciones, en un medio que no respeta los más mínimos valores éticos. Siendo un mal ejemplo para los niños que un día serán el futuro de la humanidad. La libertad de expresión acaba cuando se vulnera la ética o los derechos de las personas. Se debe, por tanto, evitar mediante leyes restrictivas la difusión de programas que conlleven la perdida de estos valores.

    En cuanto al deporte competitivo o de élite, es más que evidente, que lo único que aporta a la sociedad es entretenimiento y en ocasiones violencia. Sin embargo, conlleva un movimiento de capital económico que solo beneficia a unos pocos, Se tendría que reflexionar , si estas actividades se han fomentado hasta ahora por los estados para ser una forma de desviar la atención de las personas, con la intención de evitar que sean más conscientes de los problemas globales, locales o, quizás, ensalzar los valores nacionalistas en contra de la unidad de la sociedad.

En este texto cabrían muchísimas más ideas de las que hay expresadas, que sirviesen para crear un mundo idílico donde los seres humanos pudiesen tener una convivencia cívica, desarrollarse como personas y avanzar como sociedad en paz y armonía. No hay en este texto ideología o connotaciones políticas, sino sentido común. Indispensable para no caer en la auto destrucción.

Dejo al lector la posibilidad de añadir nuevas ideas o modificar textos, siempre y cuando las modificaciones respeten el espíritu del mismo. Todavía estamos a tiempo de cambiar las cosas y hacer que otro mundo sea posible.


jueves, 12 de julio de 2007

Esclavos ocultos en la sociedad actual

La distribución actual de la riqueza y recursos del planeta  es muy poco equitativa, tan solo un 1% de la población tiene en sus manos la práctica totalidad de de estos recursos. Si esa riqueza estuviera bien  distribuida, todas y cada una de las personas que habitan en este planeta tendrían mucho más que lo más básico. Si eliminamos al producción de  tantas cosas inútiles y tanta diversidad de cosas, no solo tendríamos de todo, sino que además no tendríamos que trabajar ni ni una cuarta parte de lo que se trabaja. Lejos de mejorar, la desigualdad sigue creciendo, así como la producción de bienes de consumo inútiles. 
Para que el sistema se mantenga tal y como está, es necesario que la economía esté en constante crecimiento. Esto se traduce en un aporte también constante de productos nuevos y de consumidores que trabajen. El problema es que las máquinas están supliendo a los trabajadores y estos ya no pueden consumir, pues no hay trabajo.

 China y otros países emergentes se han sumado a este modelo de economía insostenible. Tal situación provocará que en un corto plazo de tiempo las materias primas empiecen a escasear y que el aumento del consumo energético derivado del petróleo se multiplique por dos. De esta manera nuestra mentalidad consumista está arrastrando al planeta entero a una espiral autodestructiva de consecuencias catastróficas.
Solo un cambio de mentalidad de todas las personas que vivimos en occidente podría hacer posible evitar el más que seguro  posible desastre. No estemos concienciados, por ejemplo, de que el último modelo de todo terreno, el muevo MP4 o lo último en aire acondicionado cuesta mucho más de lo que parece. Ese precio adicional, que no vemos, no lo paga el comprador ni el empresario que lo produce, lo pagaremos todos, y con unos intereses muy altos. A si mismo, la idea de que un producto es mejor porque tenga un embase más bonito y esté más elaborado, que un coche grande y pesado da más prestigio social o que una casa mucho más grande de lo que necesitamos nos dará más confort y posición social son conceptos falsamente inculcados por la sociedad del consumo. Vivimos en la sociedad de la apariencia, del despilfarro y la injusticia.
No somos lo que somos por tener mejores coches y más potentes, mejores casas o lo último en electrónica recreativa. Sin embargo creemos con convicción que debemos poseer todas estas cosas para ser mejores personas o satisfacer nuestro ánimo lúdico y nuestro ego.

El que suscribe esta reflexión, sin duda no es inmune a las miles de horas de publicidad que a tragado. Es más, mi cerebro ha quedado tan trastocado que no veo más allá a la hora de comprar y comprar. No soy consciente tampoco de las miles de horas que he gastado de mi preciada vida trabajando para alcanzar la consecución de mis caprichos.

Sin duda alguna hay una alternativa, una posibilidad de escapar, quizás ya no sirva para mi, pero si para las generaciones venideras. Educar a nuestros hijos para que se liberen de este yugo, tomar una actitud reflexiva y responsable a la hora de evaluar sus necesidades vitales.
En la antigua Grecia se gestaron los mayores avances en matemáticas, filosofía, ética y política. Para los grandes pensadores de la época, hubiese sido imposible realizar estos avances teniendo cargas laborales. Ellos tenían esclavos que realizaban todas las tareas. Nosotros tenemos las máquinas, pero ya no avanzamos al ritmo que lo hacíamos antes, quizás sea porque nos emperramos en ser esclavos en vez de ser filósofos, matemáticos, astrónomos aficionados o hacer lo que nos salga de las narices en nuestro tiempo libre.

martes, 3 de julio de 2007

Mi experiencia en la política

Dicen, y no sin razón, que para conocer algo plenamente hay que vivirlo.  Sería por eso que me metí en un partido político, para tener la oportunidad de conocer la política de primera mano y con ello sacar mis propias conclusiones, que dejo aquí en estas líneas.

Hacía ya demasiado tiempo que en  España  la situación política estaba crispada. Nacionalismos insaciables, gobiernos negociando con terroristas, políticas revanchistas...Un panorama crispado e intolerable para mí. En aquellos tiempos, que no difieren mucho de los de ahora, no había  un partido político tuviese soluciones para arreglar todos los campos abiertos de esa situación. Tenía la opinión, como una gran parte de la ciudadanía, que la política era para gente sin escrúpulos, dispuestos ha hacer cualquier cosa para conseguir el poder o mantenerse en él; que la política estaba reservada a unos pocos tecnócratas, con la capacidad de saber mentir sin que se note demasiado. Por eso y por la corrupción, pensaba que el sistema político de partidos era defectuoso y no servía al bien común. Soy de la opinión que todos se apoyaba en idearios anacrónicos, de derechas o izquierdas. Pertenecer a uno de estos partidos hubiese representado, al menos para mi, llevar una etiqueta con la que no me sentía   identificado en absoluto.

Pero un día esto cambió. Me empecé a interesar por una serie de noticias que hacían alusión a un grupo de intelectuales que hablaban con toda la fuerza que da el sentido común. Decían las cosas claras, sin tapujos. Eran de tendencias diferentes pero unidos en lo fundamental. Hablaban de la misma manera que yo pienso. A raíz de este movimiento cívico comenzó a tomar cuerpo un nuevo partido político. Nada más ser constituido me atrajo y tuve la intención de participar en el proyecto, porque me sentía identificado con  las ideas de aquellos intelectuales y porque traía aire fresco a una atmósfera política completamente viciada. Desde luego mi intención de entrar en aquel proyecto no era para ocupar un cargo, pues yo no tengo dotes de político ni ambiciones de poder, sencillamente quería ayudar. Pero muchas cosas me retuvieron entonces. Mi falta de tiempo, mis dudas sobre mi propia capacidad y lo que podía aportar, pero sobre todo la incertidumbre de que el sistema dominado por el poder establecido permitiese a este nuevo partido alcanzar unos resultados que permitiesen introducirse en el arco político. Pero llegaron las elecciones autonómicas en Cataluña, y se hizo el milagro. Sin apenas recursos y con constantes ataques de los partidos nacionalistas  establecidos en esta comunidad autónoma, el nuevo partido alcanzó el Parlament. Fue entonces cuando hice firme mi decisión de participar y me hice por primera vez en mi vida, afiliado a un partido político.

Los sucesos desde entonces se fueron produciendo deprisa. Conocí a personas comprometidas que pensaban como yo, con ilusión y ganas de hacer muchas cosas. Empece a aprender como funcionan las cosas en política, como era una asamblea, y por primera vez a hablar en público. Yo una persona extremadamente tímida hablando en público, fue una experiencia un poco traumática. Poco a poco me fui metiendo en los entresijos del funcionamiento del partido y empezaba a gustarme todo aquello. Pero no tardaron en empezar a verse  los primeros síntomas de que algo no iba a funcionar como sería de esperar. En mi agrupación se produjeron desavenencias grabes, fruto de incomprensibles discrepancias, de la intolerancia y los personalismos egoístas de algunos. El el resto del partido también se se estaba gestando un grabe problema, precisamente con el tema ideológico y las luchas de poder, lo de siempre. Esto produjo una paralización de las actividades, desinformación y ataques personales. Comencé a ver claro que aquel partido no era diferente a los demás. Llegó un día en que me propusieron ir de delegado al gran congreso, donde se decidiría que rumbo tomaría el partido. Se plantearían enmiendas a los estatutos, al ideario y se decidirían o renovarían los nuevos cargos dirigentes del partido. Y estuve allí, metido en el ajo, participando en votaciones trascendentes y hasta disfrutando de todo aquello. En un momento dado algo ocurrió. La sesión de enmiendas a los estatutos fue interrumpida para anunciar la aprobación de una enmienda a la totalidad del ideario del partido. En dicha enmienda se cambiaban muchas cosas. Una de las cuales hacía alusión a tendencia ideológica. Todo fue muy rápido, sin debate previo y sin apenas información del contenido del nuevo ideario. Ahora ya teníamos definición política, ya eramos de un determinado lugar, yo no eramos simplemente un grupo de personas con intereses comunes dispuestos a mejorar la sociedad, ahora también eramos de centro-izquierda. En aquel momento perdí la ilusión y la esperanza, ya no sentía que estaba en el sitio adecuado, sino en un partido con ideología del siglo diecinueve. Después de algunas rectificaciones que pretendían encubrir lo que realmente se decía en en nuevo ideario, este fue aprobado por el plenario.

Luego llegó la hora de decidir los dirigentes, uno de ellos había sido reprobado por su pésima gestión al frente del partido, sin embargo tubo la poca decencia de volver a presentarse. Grandes frases y promesas, excenificación y teatro. Lo mismo de siempre, pensé yo. Lo cierto es que ya venía quemado, porque entre sesión y sesión me dediqué a recorrer sigilosamente para escuchar lo que se decía en los corrillos de gente que se reunía. Decían como debía ser la excenificación, cuando se tenía que aplaudir, quien apoyaba a quien. Trifurcas conspiraciones y preparación de lo que luego iba a ocurrir, la ratificación el el cargo del anterior dirigente. Cuando se produjo la votación y ocurrió lo inconcebible, no pude soportarlo y me marché de allí.

Pese ha todo lo que cuento aquí, creo que la experiencia ha valido la pena, ha sido muy enriquecedora y pese a todo lo vivido daré un margen de tiempo antes de desligarme completamente del proyecto. Porque la sensación que tengo, es que muchos de los que pertenecen a este partido comparten conmigo las sensaciones vividas. Quizás todavía hay esperanza.

lunes, 4 de junio de 2007

Un juez niega que la SGAE pueda cobrar por toda la música

Noticia aparecida en el País 20/05/2007


La música es lo importante de la Sala Beat. El dueño del local, Ricardo Alameda, de 38 años, saca con mimo uno de los miles de vinilos de la discoteca, lo limpia y lo pincha con esmero. Comienza a sonar Ad Gloriam, el disco psicodélico que la banda italiana Le Orme grabó en 1968. Suena bien. Las paredes están cubiertas de pósters de conciertos. La Sala Beat no está en el barrio céntrico de una gran ciudad, sino en Tomelloso (Ciudad Real), una localidad de 35.000 habitantes. Después suenan Mystic Siva, Sonic Rendevouz Band, The Hangdogs y un sinfín de grupos que sólo los muy entendidos podrían tararear. Hace 10 años, Ricardo dejó de poner a los Rolling Stones: "Hay que evolucionar".

Como el bar es peculiar, Ricardo comenzó hace dos años una batalla contra la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), que le reclamaba 120 euros al mes por los derechos de autor de las obras que pone. El coleccionista saca un álbum del que se hicieron 500 copias en todo el mundo y resume: "Éstos no ven un duro de la SGAE y no entiendo por qué tendría que pagar". Ricardo ha conseguido que, en una sentencia pionera, un juez le dé la razón.

La SGAE mandó detectives al local y a finales de 2005 le reclamó en el juzgado 2.391,08 euros por realizar "actos de comunicación pública" sin autorización de la SGAE, algo prohibido, según la Ley de Propiedad Intelectual.

Ricardo contactó con el abogado Vicente Martínez Onsurbe y decidieron que, en vez de pagar, pelearían en el juzgado para sentar precedente: eludir a la SGAE pese a poner música que no está exenta de derechos de autor. "Presentamos al juez una lista de 400 discos que pone la Sala Beat para que la SGAE dijese de cuántos de esos grupos tiene los derechos, pero no quisieron contestar. Ellos no gestionan toda la historia del rock and roll aunque actúan como si fuera así", señala el letrado.

La SGAE gestiona los derechos de autor de una gran mayoría de creadores (tiene 66.000 socios) y por eso cobra a bares, restaurantes, discotecas y bodas. En 2005, ingresó por este concepto 69,1 millones de euros, un 4,52% más que el año anterior y 56 millones más que lo que pagaron las radios, según su última memoria. El 15% de lo que reparte lo da en función de lo que más suena en bares y radios, algo que calcula mediante encuestas. La SGAE no detalla cuánto paga a cada autor, y es extremadamente remoto que Le Orme reciba algo.

El magistrado del Juzgado de Instrucción 4 de Ciudad Real, Antonio Mejía Rivera, admite que no se puede pedir a la entidad de gestión que pruebe que "todas y cada una de las obras musicales utilizadas en establecimientos abiertos al público están dentro de su repertorio", pero sí "que aporte alguna prueba". El juez añade que la SGAE sólo aportó el informe del detective en el que se afirma que "la música que suena es de actualidad sin hacer ninguna precisión". Según Ricardo, en la vista el magistrado demostró su conocimiento al preguntarle si conocía Manassas. "La banda de Stephen Stills", replicó el dueño del bar.

Por todo, el pasado septiembre, en una sentencia pionera, el juez consideró acreditado que "en la Sala Beat de Tomelloso no se comunican, emiten o transmiten obras gestionadas por la SGAE, sino, por el contrario, obras musicales de los años cincuenta y sesenta, hoy sólo en soporte vinilo, que se hallan fuera de los establecimientos habituales de comercialización y no son difundidas por programas de radio y/o televisión de difusión general"; absolvió a Ricardo y obligó a la SGAE a pagar las costas.

Este diario intentó el viernes sin éxito obtener la versión de la SGAE, pero al recurrir la sentencia ante la Audiencia Provincial dejó clara su opinión. En el texto, la entidad sostiene: "Si existe un aparato reproductor de música o televisión en el establecimiento y se prueba que se utiliza estando abierto al público éste, se devengan derechos de autor". Además, considera que "el repertorio de obras gestionadas por la SGAE es irrelevante". Es decir, que tiene que cobrar independientemente de la música que se ponga, y por eso no entró a detallar la lista de 400 discos que presentó Ricardo en el juzgado.

Una cosa curiosa del caso es que poca gente hace tanto por la música como Ricardo, coleccionista obsesivo: "Pierdo dinero organizando conciertos con grupos que sólo tocan en Madrid y Tomelloso; gasto hasta 500 euros al mes en discos y ahí ya pago derechos de autor; si entra en el bar un vendedor de discos piratas lo echo porque fastidia a mi amigo de la tienda de discos; si alguien me presta una música que me gusta, estoy nervioso hasta que no tengo el original, y no bajo música de Internet", señala con convicción.

Leer áticulo original

jueves, 31 de mayo de 2007

El españolismo no tiene futuro en Cataluña

Pues vale, pues me alegro. En Madrid tampoco. ¿O es que creéis que fuera de los feudos nacionalistas se ganan elecciones por ser "istas" de algo?

¡Qué gran desgracia debe ser esto de vivir con nacionalismo, que hasta los que están en contra lo necesitan!

Hay algunos por aquí que me dejan de piedra. Resulta que no se puede ser, simplemente CIUDADANO. ¿Os suena para qué nació este partido?
No sé quienes serán estos inspirados, a los que no tengo el gusto, pero salen ahora con que o eres catalanista (al menos un poquito) o nacionalista catalán o españolista, pero algún "ista" hay que ponerse.

Pues os aseguro que se puede vivir la mar de bien sin pensar en que estas siendo españolista o antiespañolista o catalanista o antinacionalista.


La inmensa mayoría de los que vivimos y votamos en Madrid, simplemente lo obviamos, el término "españolista" es algo que se han inventado "los otros" buscando eternamente la diferenciación. Y elegimos pizza Tarradellas o Carrefour en función del precio y la calidad, por no citar el rollo del cava que ya aburre bastante.


Yo sé que soy española porque tengo un DNI y un pasaporte que así lo dice. Y que en la ONU tiene representación una nación (transcribo de Organización de Naciones Unidas, sin más intenciones) a la que conocen como España, en la que resido.


Y a partir de ahí, me interesa muy poco el nombre, siempre que se reconozcan y garanticen mis libertades y derechos individuales. A eso se llama CIUDADANIA y es a lo que aspiramos, se supone, en este Partido.


¿Que algunos creen que se obtienen menos votos por no ponerse una etiqueta "ista" aunque sea pequeñita? Pues habrá que aguantarse, porque este Partido no nació para convertirse oportunistamente en “ista” de lo que sea, por muchos complejos que se tengan de parecer “españolista” (¡¡¡¡uuuuyyyy!!!, el coco).


Igual, estos inspirados, piensan que Aguirre y Gallardón han arrasado por ir con el rollo españolista dale que te pego; pues no, ha sido por algo mucho más sencillo: han construido kilómetros y kilómetros de metro (sin que se les cayera ningún barrio encima).

Han ganado hasta en barrios obreros de izquierdas de toda la vida, como Villaverde, ¿alguien cree que les importaba más que un bledo a los de Villaverde la bandera y el himno nacional? Pues no. Les han puesto metro, hospital nuevo y cosas así. No se han visto por ninguna parte hordas brazo en algo cantando el Cara al Sol para ganar votos.


Repito, debe ser una gran desgracia eso de vivir con el nacionalismo, porque hasta los que no lo son o son anti, lo necesitan para identificarse en contra.


No sabéis lo bien que estamos los que simplemente PASAMOS y no necesitamos lanzar más vivas que a la LIBERTAD, o ni eso, que lo importante es tenerla, más que vitorearla.


Por Gloria de Madrid




martes, 29 de mayo de 2007

Mi experiencia como interventor de Ciutadans

Cuando me enteré que había sido requerido para realizar la labor de interventor en las elecciones municipales de 2007, tuve bastantes reticencias, la primera de todas porque nunca había pasado por tal experiencia, y por tanto desconocía como es el proceso de unas elecciones por dentro. Pese a todo ello acepte, pues sabía que somos pocos y era una labor necesaria para mis compañeros.

Me presenté en el colegio en el primer colegio electoral a las 8:30 y empecé a hacer el recorrido mesa por mesa para recoger el acta de constitución. Como manda la normativa llevaba mi distintivo, que me identificaba como interventor de mi partido. No tardé en darme cuenta, que los restantes interventores de otros partidos me miraban y hacían comentarios entre ellos. Incluso, en algunas de las miradas se reflejaba un desprecio, que en algunos casos llegaban a dibujar muecas de asco en sus caras. Me hicieron sentir como si estuviese invadiendo una propiedad privada donde no se permitían intrusos. Desde luego no voy a nombrar a los partidos que pertenecían aquellos en la que esta actitud era más evidente.

Siempre con mi sonrisa en la boca y con amabilidad, solicitaba las actas a los presidentes de las mesas electorales, algunos de ellos me las daban a regañadientes, pero en general eran amables. Pero llegué a una mesa en la que había un interventor que pertenecía a un partido que no voy a nombrar, Solo diré que llevaba una camiseta con la inscripción INDEPENDENCIA en su camiseta, grande y a todo color. Cuando levantó la mirada y vio al partido al cual pertenecía empezó ha murmurar cosas ininteligibles, seguramente porque habla con los dientes tan apretados que era casi imposible entenderlo. Solo pude entender algo así como “ya están aquí estos…”. Era tal la rabia y el odio que desprendía que no tuve más remedio que apiadarme de el. Y con voz tranquila, como suelo proceder ante una persona desesperada le dije: “Disculpa, yo no he venido aquí a pegarte ni ha hacerte daño, no tengas miedo, no soy tu enemigo. He venido como representante de mi partido para verificar las elecciones. No debes preocuparte, de verdad, no voy a robarte tu cultura ni tu identidad”

Mi voz fue tranquila y sosegada pero con el suficiente volumen para ser escuchada por todos los miembros de aquella mesa. El hombre quedo perplejo, sin palabras para contestar. Los miembros de la mesa también callados, a la expectativa de lo que pudiese pasar. El presidente de la mesa sostenía en alto en acta y se quedó mirando al ofuscado interventor, como esperando un reacción violenta por su parte. Pero no sucedió nada y no di tiempo para que así fuese. Recogí mi acta de la mano del presidente y marche a otra mesa. Saludando y dando las gracias al presidente.

No voy a negar mi miedo en tal situación, porque pude percibir en aquel hombre el deseo de hacerme daño de verdad. Pero sabía que estaba en un sitio público con mucha gente a mí alrededor. Aunque parecían hostiles a mi presencia, dudaba mucho que fueran cómplices de un linchamiento.

Cabría plantearse hasta que punto esta sociedad está acumulando odio e intolerancia y ver que consecuencias podría traer esto si no se remedia pronto.

lunes, 28 de mayo de 2007

¿Democracia?

Existe una tendencia de los medios de comunicación a contribuir con su silencio al monolingüismo político, discriminando de sus artículos el ideario disidente del sistema establecido. Con ello consiguen de forma eficaz mantener la tendencia a crear una oligocracia de partidos y de políticos.

Ese silencio informativo a caído sobre Ciutadans desde el principio de su creación, sobre todo por muchos medios de comunicación afines a los grandes partidos o a los partidos nacionalistas. A esto se suma la incomprensible e injustificada discriminación que realizan las juntas electorales y una ley electoral, que con la disculpa de favorecer la gobernabilidad, prima más a los partidos más grandes. De esta manera el círculo queda cerrado y la democracia cuartada.

Además de las dificultades que encuentra Ciutadans para que su mensaje sea conocido por la opinión pública, este joven partido se ha topado con actitudes periodísticas cuya actitud resulta cuanto menos sospechosa. Estos periodistas, que hasta el momento presente han callado respecto a Ciutadans, no han dudado en cargar tinta envenenada en sus plumas para resaltar los problemas que este partido político atraviesa. Dificultades que, por otro lado, quedan ocultos en los grandes partidos, salvo contadas excepciones. Parece ser que hasta el momento en que han surgieran problemas, que por otra parte son normales en un partido tan diverso, Ciutadans no ha sido digno de aparecer en medios como TV3 o El País. Además lo hace ahora con grandes titulares: “Esperanzas Perdidas”, “Dimisión en bloque”, “Crisis en Ciutadans”. Se podría decir la típica frase que “Mal de muchos consuelo de tontos”, porque la circunstancia que expongo aquí no es una exclusiva de España. Esto se está produciendo como norma en la mayor parte de los países que practican la democracia como forma de gobierno.

Por otro lado, los enormes recursos de los que disponen los grandes partidos y el despliegue de los mismos en las campañas electorales, no deja espacio para otras formaciones políticas minoritarias. Para éstas resulta casi imposible hacer que su mensaje llegue a toda la ciudadanía. De esta manera se consigue que grandes ideas e ideologías puedan ser conocidas por la ciudadanía. Esta circunstancia, sumada al uso que los partidos hacen de los votos recibidos, pactando para provocar que no sea la candidatura más votada la que acceda al poder, está provocando el hastío de los votantes; que ven como sus votos acaban en manos de partidos que no han votado mayoritariamente. Como consecuencia de todo esto, la abstención, el gran enemigo de la democracia, gana poco a poco terreno.


Cabría por tanto cambiar la ley electoral, limitar los presupuestos de las campañas electorales o la creación de listas abiertas que evitasen la degradación progresiva del sistema democrático.

Bilingüismo mal entendido

Recientemente alguien que conocía mi pertenencia a Ciutadans, partido político que defiende entre otras muchas cosas, el bilingüismo, y que conocía también mi lugar de nacimiento, Catalunya; me preguntó que por qué no escribía mi Blog en catalán. Mi respuesta iba a ser muy simple “Me defiendo mucho mejor en español porque es mi lengua materna”

Pero por otro lado, y cuestionándome la irrelevancia de la pregunta y la obviad de la respuesta, pensé que sería mejor darle un respuesta más elaborada, y así le respondí.

Mí querido amigo:


Tu pregunta me deja un poco perplejo. Sería impensable, por ejemplo, que esta misma pregunta fuese trasladada a Bélgica, y que un ciudadano belga le preguntase a otro porque escribe en neerlandés y no en flamenco. Me pregunto si quizás me lo cuestinas porque tienes algún tipo de aversión al idioma de Cervantes, o piensas que lo tengo yo al catalán. Si es así estás equivocado.

Yo como tú soy ciudadano residente en Catalunya. Entiendo y leo perfectamente el catalán, no de la misma manera lo escribo y lo hablo. Y esto es así, sencillamente, porque preferí en su momento uno de los dos idiomas para expresarme.

Como ves, no he tenido ninguna dificultad en leer tu pregunta, que estaba escrita en catalán y supongo que tú, que has tenido la suerte de poder estudiar en español y en catalán, tampoco tendrás ninguna dificultad en leer mi respuesta. Dada esta circunstancia, los dos nos entendemos y podemos comunicarnos. Y precisamente esto me hace incidir más en lo extraño de tu pregunta, que por otra parte espero haya quedado contestada.

Un cordial saludo

martes, 22 de mayo de 2007

Los señores de guante blanco

Nuevamente, los señores de la Sociedad General de Autores (SGAE), con Tedy Bautista a la cabeza, nos salen con ridículos argumentos para atracarnos indiscriminadamente. Nos pretenden tratan a todos de delincuentes e idiotas, pasándose la presunción de inocencia por el forro, y no digamos otros derechos, como el de la libertad de expresión.

Ahora ya no solo se conforman con estimar que todos los que compramos CDs vírgenes los vamos a utilizar para copiar material protegido, ahora también presuponen que todos utilizaremos para este fin las impresoras, las cámaras digitales, las memorias, los discos duros, internet y un largo etcétera. Quizás un día solo se salven del canon los sordos y ciegos, porque a este paso son capaces de poner un canon por tener ojos y oídos, dado que con estos órganos podemos ver y oír material protegido.

Uno de los argumentos más utilizados por estos señores para cuartar el derecho a la cultura, porque de eso se trata, es la crisis del sector. Dandoles la razón tengo que reconocer que es cierto, la industria en torno a estos artistas, los parásitos que giran en torno a ellos, se llevan menos beneficios, o mejor dicho dejan de ganar en dinero que antes ganaban con mucha facilidad. Y esto sucede porque siguen anclados en un modelo de negocio obsoleto y que no tiene en cuenta las nuevas tecnologías. Por su parte, la SGAE, lejos de intentar solucionar estos problemas, que sería una forma de defender los derechos e ingresos de los autores, critican cualquier iniciativa que intente levantarle el monopolio. Critican y no se cortan, al afirmar que los derechos de los autores no están protegidos con sistemas como Copyleft creative commons u otras iniciativas del mismo estilo. Esta claro que lo que realmente quieren es seguir mantenido el monopolio de la gestión de los derechos de autor, dejando a otras iniciativas o gestores una presencia testimonial para que no digan que inflingen las leyes de forma descarada. Tendremos entonces que preguntarnos porque la SGAE se llama así, porque a todas luces, lo que esta entidad parece defender no son los derechos de los autores, si no el mantenimiento de un sistema obsoleto y su propia esistencia.

Respecto a otros argumentos, como el supuesto daño que la mal llamada piratería ejerce sobre los artistas, informes muy prestigiosos afirman que la incidencia de la piratería no solo no perjudica a los autores, sino que los beneficia. Y la verdad es que no hace falta echar mano a informes para darse cuenta de esto, basta con ver las cosas con un poco de perspectiva y no con los ojos de la codicia, que son con los que nos mira siempre la SGAE. Empecemos por lo fundamental, la necesidad de que la obra de un artista se conozca. Este hecho es, al fin y al cabo, la máxima satisfacción para un autor, y aporta por si solo los mayores ingresos al colectivo. También es la razón por la que la gente va a los conciertos; eso si, tiene que trabajar y demostrar lo que valen. Copiarse Cds como se copiaban antes las cintas o se grababan cintas de discos de vinilo, no solo no disminuye los ingresos del colectivo, sino que contribuye de forma mucho más eficaz que las caras campañas de publicidad al conocimiento de la obra. Por otra parte, las campañas de publicidad solo benefician a aquellos artistas que la empresa discográfica cree que son buenos, que no necesariamente tienen que ser los mejores, sino lo que a criterio de estas empresas es vendible. Es decir, que si no fuera por el boca a boca, o lo que es lo mismo, copiarse cds o bajarse música de Internet, los artistas que no son promocionados por las grandes discográficas tendrían que resignarse a los círculos marginales de distribución para ser conocidos. Y no por que son mejores o peores, sino porque a un empresario se le ha antojado así.

Pero no hace falta apoyarse en opiniones para argumentar, hay datos, y estos nos dicen que la música por ejemplo, lejos de estar en decadencia esta en plena ebullición. En los últimos años han proliferado con éxito muchos más locales de conciertos en directo que nunca. Igualmente se ha triplicado el número de conciertos. Por lo queda claro que el mundo de la música no esta en crisis y lo que si lo está es la industria.

Estoy completamente de acuerdo en que nadie tiene que usurpar la propiedad intelectual, que un artista debe cobrar por su trabajo ¿Cómo podría esta yo en contra de que alguien se gane la vida con su trabajo?

Pero no estoy de acuerdo en que la mala gestión de ese derecho me repercuta a mí como consumidor. Por otra parte, el material audiovisual se ha creado para ser visto y oído, es cultura, y nuestra constitución defiende el derecho al libre acceso a la cultura, y no dice nada de que solo los que tiene dinero para pagarla tengan acceso a ella ni que una entidad tenga que delimitar quien tiene acceso y quien no.

Otro de los argumentos también más utilizado por la SGAE para justificar sus atracos, es la ridícula idea de que por cada canción o película bajada de Internet se compra un disco o un DVD menos. Sin duda, yo como muchos ya nos hubiésemos gastado miles de euros si no hubiese existido el emule, porque desde luego no son precisamente baratos los originales. Además, el hecho de que me baje una canción de Internet no significa que me vaya a comprar el disco, porque, a lo mejor, el disco solo tiene esa canción que merece la pena escuchar. Yo seguiré comprando solo los discos originales o veré las películas originales que me gusten y que crea que tiene un precio justo. Jamás pagaré 18€ por un cd del cual solo pueda gustarme una canción o 10€ para ver un bodrio de película, es decir, lo mismo que hacía antes de que existiese Internet.

Otra cosa que no comprendo es la adtitud de algunos gobiernos frente a las demandas de la SGAE. Sin duda es comprensible que una empresa privada con ánimo de lucro, como es la SGAE, pretenda defender sus intereses y su estatus, al fin y al cabo, alguien tiene que pagar en mantenimiento de sus imponentes sedes, el no poco austero mobiliario y no digamos los “pequeños” sueldos de los directivos y recaudadores. Lo que no es de recibo es que un gobierno, que se dice socialista, defienda arbitrariamente los intereses de esta entidad y encima otorgue a las empresas fabricantes de hardware la categoría de recaudadores de impuestos. Que oscuros intereses moverán al PSOE y a otros gobiernos a hacerlo, ¿Quizás una parte del pastel?

No terminaré esta exposición sin hacer un especial hincapié en una cuestión que es sangrante y que atenta gravemente contra la libertad de expresión:

Multitud de páginas Web dedicadas a ofrecer enlaces de música y películas han sido acosadas y cerradas de forma cautelar. Denunciadas, claro está, por la SGAE. Estas páginas no contenían material sensible, pero decían donde se podía conseguir. Los señores de guante blanco, sustituir señores por lo que corresponde, argumentan que estas páginas se lucran gracias al trabajo de otros, para ello utilizan el hecho de que estas páginas utilizan la publicidad para pagarse el servidor. Hay que destacar la frase “Se lucran del trabajo de otros”, porque creo que es esencialmente a lo que se dedican las discográficas o la misma SGAE. Quizás la SGAE da pues por entendido que los webmasters de estas páginas no han puesto esfurzo, dedicación y tiempo para construir sus webs o buscar patrocinadores para pagarse el servidor. Quizás será porque los recaudadores de la SGAE últimamente no se tienen que moverse mucho de su sillón para ir por los PUBs y discotecas recaudando el impuesto revolucionario como hacían antes, ya que comunicaron en su momento a estos locales las ventajas de tener domiciliados los pagos en el banco.

Lo peor de todo no han sido que solo an atacado a las páginas web dedicadas a la difusión de los sitios donde se puede encontrar material protegido. Cualquier página web que haga una crítica a este monstruo financiero es susceptible de ser perseguido hasta caer abatido por la terrible maquinaria jurídica. Véase el caso putasgae o la asociación de Internautas.

lunes, 21 de mayo de 2007

Situación actual del mapa geopolítico mundial


La Tierra sustenta actualmente a más de seis mil millones de seres humanos y se prevé que para el dos mil veinticinco seamos ocho mil millones. Esta población, es por si misma, una agresión contra nuestro planeta y contra todos los seres, que aparte de nosotros, vivimos en él. Sin embargo, no es tanto el número, sino la forma en la que vivimos lo que está produciendo más daño al planeta.
Todas las especies que viven en el contribuyen, con su existencia, a preservar el frágil equilibrio natural que sostiene la vida; incluso la bacteria más insignificante puede ser crucial para que este equilibrio se mantenga. El ser humano, por el contrario, es la única especie, que además de autodenominarse inteligente, destruye de forma consciente este equilibrio natural, poniendo en peligro su existencia y la de las demás las especies que habitan este maravilloso planeta.
Los gobernantes de nuestra sociedad, supuestamente los individuos más inteligentes y cualificados, son conscientes de esta realidad, pero lejos de hacer algo por cambiar esta peligrosa situación,  siguen mirando hacia otro lado y pensando solo a corto plazo. De lo que se deduce que el ser humano está fracasando en su evolución, no tanto como especie, sino como sociedad.
En el transcurso de nuestra historia reciente, grandes pensadores han planteado sistemas políticos para regir los designios de la sociedad humana. Su objetivo era crear con ello una saciedad sin desigualdades sociales, progresista, libre y solidaría. Por desgracia, y por muy buenas que fuesen sus   intenciones, no tuvieron en cuenta la naturaleza humana. Porque el ser humano, por muy inteligente que se considere a si mismo, sigue siendo un animal irracional en muchos aspectos. sin lugar a dudas, donde mejor se manifiesta esta irracionalidad, es cuando se examina su comportamiento social.
Un ejemplo de la irracionalidad de la sociedad humana se refleja en la organización política del mundo. Porque hoy en día hay ciento noventa y ocho países o estados, cada uno delimitado por fronteras dibujadas en el mapa del mundo. Estos países se distinguen por tener cultura propia, idioma y normas. Cada uno de estos países mira por el interés propio, sin tener en cuenta los recursos naturales globales. Es evidente pues, que el ser humano no se identifica a si mismo con la su especie, sino con la tribu o el clan. Una tribu que lucha y protege su territorio de caza y a los miembros de su tribu, desestimando o dejando de lado el resto del mundo salvo que convenga al interés de la tribu. Esta organización política parece a todas luces contraria al conocimiento que ha alcanzado el ser humano de su entorno vital y científico. Porque pese a conocer las limitaciones de nuestro habitad y saber que científicamente no existen diferencias raciales o genéticas entre nosotros, seguimos viendo a nuestros semejantes de un país diferente al nuestro como una especie a parte.
El fenómeno del nacionalismo, por tanto, es una clara evidencia de nuestro primitivo desarrollo como sociedad. Y Lejos de abolirse o crear cauces para ello, es un fenómeno que sigue creciendo. Con ello se siguen creando diferencias entre culturas para justificar nuevas naciones, y no siempre de forma pacífica, contribuyendo a la posibilidad de conflictos bélicos y tragedias humanitarias.
Esta organización política es incompatible a medio y largo plazo con la paz mundial y la permanencia del hombre sobre la tierra. Lo es también con la consecución de grandes objetivos comunes y con la toma de decisiones que hagan posible que nuestra especie no acabe colapsando el planeta.
Todos los esfuerzos por crear instituciones y acuerdos comunes como El protocolo de Kyoto, las naciones unidas, la Unión Europea, etc... No avanzan porque siempre chocan con el precepto de la singularidad tribal y los intereses de cada entidad política, es decir nación. Estas naciones, dentro de sus fronteras pueden, bajo el manto de la soberanía, violar los derechos humanos, contaminar o agotar los recursos naturales, que considera suyos y no propios de toda la humanidad.
Cabe esperar que todavía, y a pesar del daño hecho, exista la posibilidad de replantearnos la dirección de nuestra evolución como sociedad. Tomando como referencia política el ser humano y no la tribu o la cultura o las singularidades raciales. Porque de otra manera nuestro futuro o el futuro de nuestra siguiente generación esta avocada al desastre.
Se podría deducir de estas palabras que soy un globalista o un defensor del NEW ORDER, es todo lo contrario. Lo que pretende este movimiento vinculado con las más altas esferas de poder, no es la defensa de la humanidad, de la que yo soy firme defensor, sino su control y esclavitud, y eso es algo con lo que jamás podría estar de acuerdo, ni yo, ni nadie que no tuviese una ambición sin límite o fuese un psicópata.




Ataque contra la cultura

radio 3



El gobierno socialista, en un intento baldío para eliminar el déficit presupuestario del ente público de RTVE, ha metido mano a RADIO 3. Muchos de los grandes profesionales de esta emisora están siendo despedidos o prejubilados. Estos profesionales, especialistas y con una experiencia de muchos años en cada de los géneros musicales que tocan, son sencillamente irremplazables. Ellos han contribuido como nadie en este país a difundir la cultura musical, se han atrevido a poner la música que ninguna emisora comercial de radio podría poner, nos han dado a conocer nuestras músicas sin perjuicios y con una total asepsia política. Sin ninguna duda, no hay emisora ni profesionales que hayan en este país que haya hecho tanto por la cultura.



Sin Radio3 el espectro radiofónico de este país se quedaría con encefalograma plano. Radio3 es un oasis en medio de un mar plagado de mediocridad y contaminado por la política y los intereses comerciales. Tan solo hace falta darse una vuelta por el dial para ver que es lo que queda sin Radio3; emisoras politizadas hasta la médula que deben cumplir el cupo lingüístico, las restantes emisoras musicales son simples gramolas que se dedican a poner éxitos consagrados y que no deben trabajar con más de doscientos discos al mes. Por último quedan las grandes cadenas, cada una de ellas dedicadas al entretenimiento, o mejor dicho, al atontamiento de la ciudadanía. Unas cadenas cuyos informativos tiene una clara tendencia a sesgar la información dependiendo de la orientación política del grupo.



Este gobierno en vez de cargar contra Radio3 y sus profesionales, podría volver a convertir TVE en un servicio público, algo que ha dejado de ser hace mucho tiempo para dedicarse a hacer la competencia a las televisiones privadas, cuya programación parece hecha para idiotas y hambrientos de miseria humana. Esta medida sería mucho más eficaz y provechosa para la ciudadanía de este país que cuartar RADIO3. Porque hacer esto sería como cerrar el Prado por no ser rentable.