Nos encontramos en
una encrucijada vital en la forma en que queremos permanecer encima
de este planeta. Ha llegado el tiempo en que tenemos que decidir
entre seguir siendo miembros obreros de una colmena o ser seres
libres. La decisión es simple pero trascendente, pues implica
cambiar nuestro modo de vida, objetivos y creencias. Para ayudarte a
decidir te explicaré donde estamos:
Donde estamos
Vivimos en una
colmena humana donde, al contrario de una colmena de abejas, en
donde la reina procura lo mejor para su comunidad y está a su
servicio, nuestra reina solo procura su bien, aunque sea a costa del
sufrimiento del resto de la colmena. Así ha sido desde que hay
reinas en nuestra colmena; demasiado tiempo hace de eso ya. Ahora las
cosas están cambiando y la reina tiene un gran problema. Se ha dado
cuenta que no necesita tantos obreros y pretende reducir su número.
A parte de este problema, algunos individuos le están plantando
cara y comienzan a pensar por si mismos, algo que amenaza su reino
de tiranía. Un reinado creado a base de mentiras que se ha
mantenido gracias a estrategias de gobierno sibilinas y bien
planificadas. Esta es tu realidad.
Donde hemos
estado
Hemos vivido mucho
tiempo en esta colmena y hemos comprobado que todos los sistemas
representativos aplicados en ella han sido un fiasco para nosotros y
han favorecido a la reina y su séquito. República o monarquía
parlamentaria se acaban convirtiendo en totalitarismo por ser
permeables a intereses ajenos al bienestar de la comunidad. Ciertos
elementos son capaces de convertir cualquier sistema de gobierno en
una dictadura mediante la corrupción, el chantaje, la extorsión y
el poder que les da el dinero, inventado precisamente para este fin;
al final la reina siempre acaba en el poder. Cualquier sistema que
parta de la reina tiene un único fin, y es mantener tu condición.
Un sistema que ha sido corrompido deja de servir al pueblo para
servir a los intereses económicos y las ansias de poder de la reina
y sus acólitos, subyugando al resto a una vida servil y miserable.
Esto ha sido así desde la revolución francesa, y pude que mucho
antes.
Las mentiras y la
manipulación
Quizás porque no
interese, el los colegios no se enseñe todo lo que sucedió en la
etapa posterior a la revolución francesa, cosa que sirvió para
enmascarar su gran fracaso. Si, se habla del ascenso de Napoleón al
poder, pero no que con él cayeron las cabezas de gran parte de los
ideólogos de la revolución y sus ideas. También llegó la
educación al pueblo, pero era una educación clasista y destinada a
la separación de clases; igual que en una colmena. Esta forma de
educación no ha cambiado desde entonces. Tiranía, revolución,
simulacro de democracia, guerra y nuevamente tiranía, estos son los
pasos cíclicos y constantes que hemos tenido hasta ahora. En ninguno
de estos pasos el individuo ha sido protagonista, siempre ha estado
conducido por la reina y su pandilla de macabros pensadores, quienes
los han hecho posible de forma intencionada. En la crisis en la que
estamos inmersos ahora está sucediendo lo mismo, estamos en algo que
se parece a una democracia pero que no lo és en absoluto. Esa etapa
está llegando a si fin y la siguiente está a punto de llegar; la
guerra. Si analizamos con detenimiento la información internacional,
no la que no llega por los medios oficiales, sino la verdad de los
hechos, nos daremos cuenta de que las piezas del juego ya se están
colocando en el tablero. Como en toda guerra vivida hasta ahora, los
muertos y el sufrimiento, siempre serán los mismos, es decir,
nosotros los obreros. Podemos seguir en la ignorancia o pensar que
la sangre no llegará al río a pesar de las evidencias. En tal caso
no debéis seguir leyendo, la televisión es más divertida. Si por
el contrario queréis evitar que se inicie un nuevo ciclo prestad
atención.
Como he dicho, hemos
sido adiestrados para cumplir una función en una colmena humana a
las ordenes de oscuros intereses. Toda nuestra educación ha sido
dirigida y planificada para este fin. Lo primero que debemos hacer
pues, es desconfiar de todo lo que nos han enseñado, pues creer que
todo lo que nos han mostrado es cierto nos aleja de la verdad y el
conocimiento real. Todas las leyes, normas y dictados provenientes de
los políticos son sospechosos de ir en nuestra contra, pues todos
los políticos están influidos por los poderes económicos que los
controlan y, por supuesto, la por reina. Por tanto, sabemos que no
serán para nuestro beneficio, sino para el de ellos.
La solución
No nos han enseñado
que dentro de cada uno está la posibilidad de ser los reyes de
nuestra propia vida. Lo que representa nuestra libertad individual de
ser únicos e independientes sin dejar de ser parte de un todo. Esta
facultad es inherente a nuestra existencia y está presente en cada
uno de nosotros sin excepción. Podemos decidir, en nuestro libre
albedrío, sobre nuestra vida en función de nuestras aspiraciones,
lo que nos confiere un poder mayor que el de cualquier reina o
gobierno que quiera subyugarnos. Pero antes de liberar ese poder
tenemos que ser conscientes de que lo tenemos, cosa que por todos los
medios han intentado evitar, sobre todo con la enseñanza obligatoria
y el entretenimiento de masas. Una vez seamos conscientes de este
poder y lo apliquemos, no pretendamos hacer lo mismo que los que nos
gobiernan, ese poder solo debe ser aplicado sobre uno mismo, para
nuestro bien y para el bien de quienes nos rodean. Pero ojo, solo si
aplicamos el poder sobre nosotros primero, podemos ayudar a los demás
con él.
Si llega la
guerra
Sepárate de
cualquier organización política o movimiento social si no estás
seguro de que todos sus miembros son conscientes y han aplicado el
poder en si mismos, sino acabarás perteneciendo a una organización
permeable o otros intereses que no sean el bien común. Jamás te
alistes en un ejército o cuerpo de seguridad. Los seres conscientes
no necesitan protección y mucho menos imponer nada por la fuerza. La
desobediencia civil es un derecho que quedara anulado, al igual que
el derecho a manifestarse si llega una guerra, pero mientras eso pase
hay que utilizarlo. Si participamos de cualquier manera en la guerra
colaborando con la reina en sus planes, y no importa que noble causa
se persiga; ninguna merece la muerte de un solo ser humano. Si ves
que la guerra se hace inevitable, cosa que parece, vende todas tus
pertenencias y aléjate de las ciudades. Compra una tierra que pueda
cubrir tus necesidades o funda una comunidad auto-sostenible en un
pueblo con gente como tu. Procura tener acceso a agua potable y
tierra para poder cultivar. Tener energía es posible mediante
recursos naturales inagotables como el Sol, biomasa y el viento,
intenta colaborar con personas que tengan conocimientos en esta
materia y adquirir sistemas de energía. Si aun te sobra algo de
dinero, compra oro u otros metales preciosos, pues el dinero no
valdrá nada. Por desgracia queda mucha gente dispuesta a matar a
otras obedeciendo como borregos las ordenes de los que pretenden su
destrucción. Existen muchas probabilidades de que se utilicen bombas
nucleares, en cuyo caso tú supervivencia será mucho más
complicada. Intenta establecer tu comunidad lejos de cualquier
instalación militar o ciudad importante, pues lo más probable es
que sean objetivos. Existen miles de armas nucleares en el mundo,
suficientes para provocar un invierno nuclear, por lo que sería un
error no contar con esa posibilidad. Si adquieres un parcela, intenta
construir tu vivienda parcialmente enterrada y acumular víveres y
elementos para tu supervivencia.
Ten en cuenta, que
cuando la guerra acabe quedaremos muy pocos, quizás insuficientes
para plantar cara a las ratas que se habrán escondido en los
refugios apretando los botones de la destrucción. Para entonces,
mucho habrán muerto por su inconsciencia, y no fue tu culpa, pues al
no actuar en su momento, ellos fueron los responsables. Podían
haberse dado cuenta de su error, no le faltaron indicios, pero no
quisieron escuchar ni ver. Prefirieron seguir los telediarios y las
mentiras de los que le condujeron a la muerte, no te sientas culpable
y procura sobrevivir al holocausto.