Mal que me pese a
mí y a otros muchos que han profetizado lo que ocurriría, la
traición y el engaño al pueblo griego se han consumado. Tal y como
había sido pronosticado, planificado y después de un amago de
democracia, que no fue más que una escena de una obra pobremente
interpretada pero magníficamente planificada, Tsipras ha mostrado su
verdadera identidad como un buen sirviente del sistema capitalista;
poniendo en manos de los banqueros a todo un país, a cambio,
prácticamente, de nada. Es muy posible que Tsipras haya cumplido
con las órdenes desde el principio dadas por la élite que ansía
el control total del ser humano. Esta élite tenía tenía, desde
hace mucho tiempo, a la cuna de la civilización humana como
objetivo. Sea como fuerte, la cuestión es que, al final de esta obra
de teatro macabra, de esta tragedia, nunca mejor dicho, griega,
este pueblo, igual que muchos antes, ha terminado sin soberanía, sin
recursos y sin patria. Porque todo cuanto se puede vender del país
será vendido, nada quedará en manos públicas a fin de pagar una
deuda usurera e ilegítima, que por muchos esfuerzos que se hagan,
jamás habrá dinero para pagar, ni siquiera los intereses de la
misma.
Los pobres griegos
no se enteran, ni se imaginan siquiera, que las penurias que hubiesen
pasado de haberse salido del sistema, hubiesen sido una broma
comparadas con las que tendrán que pasar por permanecer en el
euro. Nadie les ha explicado nada sobre las consecuencias, al sido
conducidos y engañados. No han querido escuchar a los que le
hablaban del poder inmenso de un NO a Europa. Han dicho Si al
sometimiento, a la austeridad, a una vida esclava, perdiendo una
oportunidad de oro para destruir el sistema opresor que dependía
de esta jugada para proseguir con sus planes. Desgraciadamente, con
SI, hemos perdido todos los que creemos en la libertad de verdad.
Esto no sucederá
porque Grecia es una tierra baldía, carente de recursos naturales,
desértica y habitada por vagos que no se preocupan más que por si
mismos, como nos quieren hacer pensar los medios de comunicación,
sino por un plan diseñado por los mismos terroristas financieros de
siempre. Los que antes se apropiaron de África y de sus ricos
recursos sembrándola guerras tribales que todavía perduran,
hundido a media latino América en la miseria y el populismo poniendo
a sus títeres en el poder, provocado crisis artificiales para hacer
acopio de propiedades sin pagar un duro por ellas. Los mismos
terroristas que han vendido armas a ambos bandos en todas las
guerras mundiales, los mismos que arman y entrenan a terroristas y
luego imponen leyes que suprimen libertades en nombre de la
seguridad. Grecia solo es un paso más en su conquista, pero un paso
importante.
Tendríamos que estar prevenidos y no hacernos ilusiones con otros líderes, supuestamente salvaparias y perroflautas que van de revolucionarios, no vaya a ser que sean unos infiltrados del sistema , como Tsipras.
Syriza o Podemos se
presentan como gallos de pelea contra el sistema, pero al final
acaban siendo defensores del mismo. Así sucede porque, en realidad,
detrás de estas formaciones políticas no hay más que un manojo de
ideas ilusorias. Los seguidores de estas formaciones, pobres ilusos,
ignoran que solo es posible la revolución si previamente se
desmantela el sistema capitalista; algo que ninguna de estas
formaciones a propuesto ni propondrá, porque fueron creadas por el
propio sistema como cruz de la misma moneda.
El propio Pablo
Iglesias, a la hora de criticar a Alexis Tsipras, afirmó que tenía
que haber negociado más. Sinceramente, esto no es lo que se
esperaría de un líder revolucionario. Lo lógico, dada el supuesto
pensamiento revolucionario de Iglesias, es que lo hubiese dicho otra
cosa, como por ejemplo, que Alexis tenía que haber mandado a la
CE y al FMI al mismo lugar donde los islandeses los mandaron en su
momento desde el principio. Pero está claro, que tanto Iglesias como
Alixis, como cualquier marioneta que crea este sistema, obedecerá
a sus amos. Así pues, bajo ese manto de revolucionario y
perro-flauta, no hay más que otro sirviente del sistema, jugando a
ser el poli bueno.
Ya no se puede
seguir ideales de hace cientos de años; capitalismo, comunismo,
nacionalismo y todos los demás ismos. Todos estos conceptos han
quedado eclipsados por el conocimiento, la ciencia y la razón.
Estos ideales, basados en la lucha de clases, deberían ocupar el
mismo lugar que ocupa la religión. Aquel que siga esgrimiendo estos
ideales como bandera, sean del lado que sea, solo solo es una piezas
del juego que se está jugando en tu mente. Un juego hecho para
distraerte mientras te exprimen como fruta en la licuadora.
El próximo domingo,
por una vez, y sin que sirva de precedente, Alexi concederá la voz
al pueblo griego, algo que se debería hacer con cada ley o cada
decisión de cualquier gobierno; vamos, lo que debería ser normal
en una democracia de verdad. Pero por una vez será concedido, como
si fuese un gran regalo de un gran demócrata, un regalo envenenado.
Porque sea cual sea el resultado, ya es demasiado tarde. Los
griegos, ya no pueden desvincularse de este sistema. Además, votarán
en un ambiente de incertidumbre y miedo, aterrorizados por las
amenazas de esos terroristas económicos llamados banca privada y sus
sirvientes, bombardeados por los bien pagados sicarios de la pluma.
Si deciden no asumir las condiciones de sus acreedores, sufrirán
penurias y aislamiento. Quizás, hasta tengan que echar mano de las
armas que el gobierno alemán le obligo a comprar a condición de
estos le prestasen dinero. Esas armas podrían servir ahora para
contener la furia de un pueblo umillado.
Pero la cosa no
acabará allí, claro que no. Este plan es mucho más complejo de lo
que parece. Todo el sistema económico está a punto de colapsar y
Grecia puede ser el detonante de una bomba de proporciones inauditas.
Una bomba, que de estallar, reiniciará el sistema e impondrá el
nuevo orden que tanto ansían las mentes perversas que están detrás
de todo esto. Unas mentes que han ideado un plan donde nadie pueda
quedar fuera de control.
Imaginen un mundo
donde tarjeta de crédito y documento de identidad estén fusionados,
donde se elimine el dinero efectivo ¿Donde quedará la libertad
entonces? Este es el plan, lo que pretenden de esta nueva crisis
artificial.
Defenderse de lo que
ya parece inevitable es difícil a estas alturas, pero todavía hay
tiempo. Algunos acumulan oro, sobre todo los más ricos, pero el oro
no llena los estómagos y su valor es como el del dinero, tiene el
que le quieran dar. Los más listos, están haciendo acopio de
tierras fértiles, a ser posible con agua, pero la propiedad de la
tierra es algo que depende de los gobiernos y de las leyes, que
pueden cambiar al antojo de regímenes totalitarios. De la misma
forma que ya hoy, muchos gobiernos hacen pagar impuestos por el Sol
o uso del agua, en el futuro pueden exigir tributos impagables por
las tierras o explopiarlas. La única forma de desbaratar los planes
de la élite, es la desobediencia y la resistencia pacífica. Lo
único que necesitan para mantenernos sometidos es nuestra atención
y sometimiento voluntario. Solo quitándoles eso, su feudo,
aparentemente inexpugnable, se vendrá abajo.
Hay muchas
alternativas para organizar el mundo y la sociedad humana, de forma
que todos, sin excepción, tengan las mismas oportunidades y puedan
realizarse como seres humanos. Desde luego, ninguna de las propuestas
que tiene para nosotros los que ostentan el poder en estos momentos
de oscuridad, desea eso para nosotros. Porque para que halla ricos,
debe haber muchos pobres, algo que nunca debería suceder en un mundo
de abundancia como este, que bien gestionado y aplicando la ciencia,
debería procurar nuestro bienestar.
Hace ya más de un
mes que no tengo línea de teléfono ni Internet a causa de la huelga
no oficial de los técnicos del monopolio llamado Moviestar; de ahí
mi silencio en este blog. Hoy me he tenido que tirar de móvil para
publicar este post, pero tenía que hacerlo.
A pesar de que han
sido muchos los que hemos sufrido los sabotajes de los técnicos, mal
pagados y cabreados de Movistar, nada o muy poco se ha hablado en los
medios de comunicación de ello. La razón de este silencio
informativo, como dije en otro post, es fácil de intuir: la
corporación tiene acciones en muchos de estos medios y en los que
no, invierte grandes sumas en publicidad. Así es normal que ninguno
se atreva o decir palabra que pudiese molestar; por la cuenta que les
trae, claro.
Desesperado he
llamado a los supuestos competidores de mi compañía, pero no hay
alternativa barata ni de mejor calidad, porque todos son simples
arrendatarios de las líneas y no proveeodores de servicios. Por otro
lado, mi compañía actual no puede darme ninguna solución más que
esperar a que los técnicos de Movistar se dignen a arreglar mi
linea, es decir, que empalmen los cables que cortaron. Mi compañía,
como todas las demás, no tiene técnicos ni se cuida de las líneas.
La responsabilidad de las líneas es de Movistar, que es la
propietaria. Pero a la gran compañía mi problema, como el de tantos
otros, le importa un comino.
No quiero ser
malpensado, pero supongo que esta demora, que calificaría de
tercermundista, podría ser para que pierda la paciencia y me pase
a la fibra óptica que han instalado recientemente en mi barrio,
también propiedad de los mismos. Pero si es lo que esperan, pueden
esperar sentados. No voy ha pagar por un servicio que cualquier
alemán tendría por la mitad de precio. Ni que venga con canales de
televisión, que bien podrían metérselos por el sitio que más le
duela y que no quiero para nada.
Resulta paradójico,
que estas mismas líneas de cobre, utilizadas ahora para servir de
soporte a una red lenta y de muy baja velocidad, un día nos
pertenecieron a todos, antes de ser mal vendidas a los amigotes de
políticos de turno. Pese a que desde entonces han sido pagadas mil
veces, seguimos teniendo una de las ADSL más caras y de peor calidad
de Europa. La inversión les ha salido redonda, es de suponer que
suficiente para haber invertido en infraestructuras modernas o haber
abaratado el precio de las redes antiguas. Pero nada de eso a
ocurrido, solo los sirvió para poner lineas de fibra con tecnología
obsoleta y llenándose los bolsillos a costa de cobrarnos de más por
un servicio pésimo.
En las imágenes se puede ver es lamentable estado de conservación de estas lineas y la falta de protección de las cajas, donde cualquiera puede abrirla y destrozar el cableado ¿y esto es una gran compañía de teléfonos?
La respuesta del
gobierno español al movimiento 15M fue la ley mordaza. De la misma
forma que el terrorismo sirvió como escusa para que los estados
eliminen libertades, derechos o violen nuestra privacidad. Es la
vieja estrategia de problema, reacción, solución. Su eficacia ha
sido tal, que no es exagerado decir que ni el mismísimo Hitler
hubiese soñado una mundo mejor. Ni siquiera George Orwell fue capaz
de imaginar hasta que punto fue profética su novela 1984, pues lo
que tenemos ahora es casi peor que el mundo que él recreo. Nos
vigilan, nos someten a un sin fin de leyes, nos prohiben todo tipo de
cosas, cuartan nuestra libertad, condicionan nuestra educación, nos
obligan a mantener el sistema con trabajo esclavo, nos enferman, y
nos atontan con sus entretenimientos, todo ello en pro del dios
dinero y el poder. Las democracias han quedado secuestradas por las
multinacionales, los gobiernos contaminados de los intereses
financieros, la libertad convertida en una palabra sin significado.
No se puede negar que de nos ser por el terrorismo o por movimientos
como el 15M, esto no hubiese sido posible.
Son muy evidentes
las vinculaciones del terrorismo con las cloacas de algunos estados,
de la misma forma que el 15M es un producto de los servicios secretos
españoles. A estas alturas de la película, donde las informaciones
corren libremente, es ser sumamente ingenuo pensar que esto no es
así. Las armas no crecen en los árboles, los lanzagranadas de alta
tecnología no son fabricados en un taller clandestino, se fabrican
en los estados poderosos, los mismos que financian a estos grupos
armados aparecidos de la nada. De la misma forma, en una sociedad
tan polarizada como la española, no hay movimientos espontáneos que
surjan de la nada sin instigadores que lo fomenten. Sé que es
difícil pensar que son los propios gobiernos quienes promueven
este tipo de amenazas, pero cuando uno ve las consecuencias, no le
cabe otra hipótesis viable. El problema lo han creado ellos para
implantar cosas que de otra forma nadie aceptaría. No es nuevo, ni
es la primera vez que se hace. A lo largo de la historia se ha hecho
muchas veces, de la misma forma que se han utilizado los atentados de
falsa bandera para provocar situaciones favorables al poder.
Solo tenemos que
fijarnos en algo sutil, de lo que nadie habla y que no se dice en los
medios de comunicación. La auténtica amenaza para el bienestar de
todos está en los paraísos fiscales. Allí se gurda el dinero que
sirve para comprar armas, es donde se evaden los impuestos que
podrían mejorar la vida de la gente, es donde residen las grandes
fortunas del narcotráfico y de los políticos corruptos. Sin duda es
uno de los mayores problemas que tienen actualmente el mundo. Pero
claro, siguen ahí, nadie los toca. Ningún gobierno hace nada por
erradicarlos, no hay soldaditos americanos invadiendo estos lugares
para devolver el dinero a los pobres o a las arcas de los maltrechos
estados víctimas de la especulación y de la deuda usurera. Son
auténticos terroristas que matan de hambre a mucha gente, pero nadie
mueve un dedo. Muchas bonitas palabras, alguna que otra concesión,
pero ahí están, protegidos por todos los gobiernos.
El 15M, que ahora
vuelve para decirnos que siguen en la brecha, no me da ninguna
confianza. Para mi, los resultados de sus existencia son más
represión, y lo único que realmente importa son los resultados.
¿Acaso traen algo nuevo? ¿La abolición del dinero? No, no traen
nada de esto, de hecho no es más que humo. Pues cuando no tienen
ninguna alternativa creíble, no es un movimiento revolucionario,
solo hacen el ruido suficiente como para justificar una reacción del
gobierno. Asambleas sin resultados, donde no se establece una
desobediencia civil activa, una revolución de verdad, un reset del
sistema o la abolición de un sistema ya caduco que limita las
aspiraciones del ser humano.
Olvidan que hay
otros caminos, que es posible crear una sociedad justa, donde el ser
humano solo tenga que trabajar la mitad de lo que lo hace ahora o
quizás menos. Elimínese la propiedad privada, el dinero y los
estados y tendremos un mundo más humano. Utopía no es un sueño,
puede ser una realidad si lo que realmente se quiere es hacerla
posible, pero no están por la labor. República, comunismo,
monarquía, capitalismo, un sin fin de ideas confusas que nunca han
llegado a buen término. Todas estas ideologías y otras tantas que
me dejo, han consistido en el sometimiento de la mayoría a un
pequeño grupo elitista, que lejos de mirar por los intereses de
todos, solo mira por los suyos.
Pocos se han
enterado de la huelga y de las manifestaciones de los técnicos de
mantenimiento de la mayor compañía telefónica de España, o mejor
dicho la única. Unas protestas bien fundadas, ya que la situación
actual de este colectivo es terrible, aunque no muy diferente a la
de otros trabajadores, cuyas empresas, a pesar de tener grandes
beneficios, han aprovechando la crisis para reducir salarios y
precarizar los contratos, sirviéndose de subcontratos y otras
estrategias similares que van en contra de los derechos laborales
ganados con mucho sufrimiento.
Esta compañía,
como muchas otras, han llevado a sus trabajadores a la esclavitud sin
ninguna justificación; bueno, ninguna no ya que los beneficios de
sus altos cargos y los de los inversores de han crecido en
proporción a lo perdido por sus trabajadores. Estamos hablando de
una compañía propietaria de todas las líneas de cobre y que ahora
también está monopolizando la fibra óptica. En estas condiciones,
la competencia es un puro camelo. Todas las otras compañías son
satélites que utilizan o alquilan sus infraestructuras.
Infraestructuras por cierto, obsoletas. Pues como ya dije en otro
post, no solo las lineas de cobre lo son; la fibra que están
poniendo es multimodo, una tecnología que ha ya se ha quedado
antigua. Pero como ha ocurrido con las línea de cobre, la
aprovecharán hasta sacarle todo el jugo para luego implantar otra y
volvernos a pedir dinero por ello. En esta situación, no es de
extrañar que España esté a la cabeza de los países donde las
telecomunicaciones son las peores y más caras.
Lo más escandaloso
y el motivo fundamental de este post es que casi ningún medio de
comunicación de este país, especialmente la televisión, haya
dedicado algún comentario a las numerosas y concurridas
manifestaciones de los trabajadores de esta compañía, la precaria
que viven o la situación de las telecomunicaciones en el país. Pero
no deberíamos extrañarnos mucho, pues la razón es que parte de los
beneficios obtenidos por la situación de falta de competencia real
es que se puede invertir mucho en publicidad, comprar medios de
comunicación o contratar en sus consejos de administración a
políticos; lo que se conoce como puertas giratorias. Exactamente eso
es lo que hace esta multinacional, cuyo capital un día fue de todos
los ciudadanos. Un capital humano y técnico malvendido, curiosamente
por el socialista Felipe Gonzalez; aunque todo hay que decirlo, por
orden expresa de la EU. Así pues, está claro que los medios de
comunicación no pueden morder la mano que les da de comer; no solo
por perder la fuente de ingresos que supone la publicidad, sino
porque buena parte de ellos están comprados. Así es como se
consigue que los medios de comunicación masiva hayan quedado
reducidos a meros productores de propaganda y exaltación del
liberalismo. En tales condiciones, ya es imposible creer o orientarse
por ellos, están contaminados y no son fiables; cosa que ya se sabe
desde hace tiempo.
Pro otra parte, no
hay que olvidar nunca lo que significa una privatización para
entender todo esto, sobre todo si lo que se privatiza son empresas
vinculadas a sectores estratégicos de un país, como es la energía,
las telecomunicaciones... en definitiva los servicios básicos. Se
trata de convertir algo que es de todos los ciudadanos y ha sido
pagado con sus impuestos, en propiedad privada de algunos, ya sean
extranjeros o inversores que solo quieren conseguir un rendimiento
económico, sin importarles para nada el bienestar de los ciudadanos
o la calidad del servicio. La privatización de servicios significa
perder la independencia de un país y de los gobiernos. El país
queda completamente subyugado al capital y los intereses económicos,
que como todo el mundo sabe, no son los mismos que los intereses de
los ciudadanos.
En definitiva, esto
es más de lo mismo, cosas que se suman a un sistema neoliberal que
está conduciendo al ser humano a un estado de esclavitud, donde la
libertad desaparece para implantar, de facto, un sistema totalitario,
donde el capital es lo que está por encima de la necesidad humana.
Si esto es lo que pasa cuando se privatiza este servicio público,
imaginen lo que puede pasar con la sanidad.
Quizás muchos de
los usuarios se hayan visto afectados por averías, fruto de sabotaje
de los piquetes, pero en mi opinión no les faltan motivos para hacer
estas y otras acciones más contundentes. Quedarse impasibles
mientras el movimiento neoliberal va destrozando todo a su paso es
casi peor que ser uno de estos enfermos que no les importa más que
engrosar su cuenta de resultados a costa del mal de otros. Es algo
que el capitalismo llevado a su extremo ha favorecido y lo sigue
haciendo, cada vez con más virulencia.
No hay que
plantearse si las privatizaciones son buenas o no; a la vista están
los resultados para quieran verlos y no ignorar sus nefastas
consecuencias. A la hora de votar en en esta democracia contaminada
por los medios de comunicación y condicionada por la opinión de una
mayoría aborregada, hay que tener en cuenta que quizás no sea tan
descabellado votar a partidos políticos de que pretendan
nacionalizar sectores estratégicos. Lo malo es que ya sabemos en que
quedan las promesas electorales una vez que los partidos acaban en el
poder; siempre se someten a los poderes económicos, incumpliendo sus
promesas y haciendo lo que le interesa al poder.
Los gobiernos no
quieren que seas sabio, ninguna institución política o religiosa
desea personas sabias en su seno. Todas temen a estas personas
porque no obedecen ciegamente, porque no se dejan manipular o
doblegar, no actúan como robots, se cuestionan toda la información
que reciben. Para una persona sabia no hay fuente de información
fiable, todas son cuestionables, tampoco líder político de fiar.
Las personas sabias prefieren morir antes que vivir siendo esclavos.
Estas personas son temidas por las religiones y las multinacionales,
rechazadas por los ejércitos odiadas por los gobiernos; que harán
todo lo posible para neutralizarlas.
No hay que confundir
la inteligencia con la sabiduría. Aunque es cierto que para ser
sabio se necesita inteligencia, no es cierto que alguien inteligente
tenga que ser sabio. Hay personas muy inteligentes, que pese a su
gran intelecto son unos ineptos, es más, puedes ser psicópatas
dispuestos a joderte la vida. Las personas sabias no van por ahí
haciendo el mal a los demás, aprovechándose de ellos o compitiendo
contra otros, colaboran y se ayudan entre ellos, porque como sabios
saben que de ello recibirán mucho más que lo que ofrecen. No
rehuyen de las experiencias nuevas ni hacen juicios a priori. Saben
perfectamente que las cosas pueden no ser lo que parecen.
Todo nace con un
comentario o con una intuición; algo no cuadra y te indica que las
cosas no son como parecen u otros dicen que son. Si ante esa duda no
buscas tu propia respuesta, a buen seguro no serás una persona
sabia, porque las personas que pretenden tal atributo quieren
conocer su entorno para estar prevenidos de eventualidades. Las
versiones oficiales, lo que diga la ciencia, la apariencia, nada de
esto basta para configurar una verdad. Es la propia experiencia y los
resultados de la misma lo que configuran el entorno. Solo cada uno
puede dibujar su propio mundo.
La volatilidad del valor del dinero está provocando que en los últimos tiempos que nuestro trabajo pierda también valor, es decir, los sueldos disminuyen y el coste de la vida y los impuestos suben. Hoy tener un trabajo ya ni siquiera garantiza disponer de lo necesario para vivir. Esta distorsión se debe a cuatro ideas , carentes de toda razón y lógica, que han se han impuesto como el ideario macabro que condicionado nuestras vidas hasta llegar a la semi-esclavitud:
1. Sociedad de consumo: Constantemente estamos siendo bombardeados con estímulos subliminales o directos que no conducen a pensar en una idea del bienestar equivocada y maniquea, donde el lujo y lo superfluo son las metas y lo necesario representa la pobreza. Algunas de las ideas que hemos adoptado son de una estupidez impropias de gente que se supone inteligente: Pensar, por ejemplo, que para ser diferentes hay que tener cosas diferentes a los demás, aunque estas cumplan la misma finalidad, que lo escaso es valioso por ser escaso y no por su utilidad real o que la ropa distingue a la persona que la lleva, entre otras muchas; son las ideas estúpidas que han conformado lo que llamamos sociedad de consumo. La consecuencia de este pensamiento ilógico, en mi opinión inducido de forma intencionada, es una mayor necesidad de trabajo y una desigualdad de recursos básicos creciente. Mientras unos nadan en el lujo, otros tienen, literalmente, que matarse a trabajar para asegurarse de tener lo básico. Así mismo es la causa de que algunos psicópatas atesoran cantidades indecentes de dinero, suficiente como para que no hubiese una sola persona en este mundo que pasase hambre. Pero claro, sin la sociedad de consumo, sería impensable la existencia de de la segunda idea equivocada.
2. El dinero: Es la fuente de toda confusión. En si mismo, representa una gran mentira por la que la mayoría de personas perdemos la vida trabajando inútilmente para obtenerlo, y lo hacemos sin ser conscientes que no tiene un valor real. Se ha convertido en una motivación y un objetivo vital, a pesar de ser una simple representación de un valor efímero y manipulable. Unas cuantas entidades privadas lo emiten y lo regulan en exclusiva, lo que hace que quedamos a su merced, sin defensa posible ante sus decisiones. Pero lo peor que tiene el dinero son las cosas que se hacen por conseguirlo, ya que se ha convertido en una motivación en si mismo, en un bien. Hoy es más importante obtener beneficio monetario que beneficio real. Esto es así hasta el punto de que algunas empresas farmacéuticas producen medicamentos que no para curar, sino para hacer que la enfermedad se vuelva crónica y poder vender más producto. Otros se dedican a producir cosas con fecha de caducidad inducida para poder así vender más; lo que se llama obsolescencia programada. Y si hay alguien que hoy en día piense que algunas empresas no ocultan tecnologías que arruinarían sus negocios, aunque estas tecnologías mejorasen el mundo, es que no puede ver más allá de sus narices, pues si hay dinero que perder no importa quien sufra. En resumen, todo lo que se haga debe hacerse para conseguir dinero, pero claro, el dinero no es más que una representación, no es un beneficio real directo que suponga una mejora en la calidad de vida, sino solo la obtención del mismo.
3. La política: considerar que las instituciones que gobiernan el mundo en un sistema basado en el dinero, van ha defender el beneficio humano y no el monetario, es tan ingenuo como pensar que una empresa armamentística produce armas para mantener la paz. No hay en la práctica ninguna órgano gubernamental que no esté contaminado por intereses financieros, ya sean las personas que dirigen o de la institución en si. Todas lo estamentos del estado u organizaciones políticas, alcanzado cierto tamaño o nivel de poder, acaban en manos de los intereses capitalistas.
4. Propiedad privada. En si mismo es un término falaz, teniendo en cuenta que la vida tiene fecha de caducidad. Es absolutamente inmoral tener algo útil para otras personas guardadas en una vitrina, sólo para contemplarla. Tan inútil como desperdiciar la riqueza de una tierra cultivable para que el dueño y señor de las tierras la utilice como coto de caza particular. El interés común debe prevalecer siempre sobre el particular. Ya Platón intuyó que su república no se podría salvar si no se arbolecía la propiedad privada. Y efecto, la propiedad privada representa uno de los defectos de la mente, el apego.
Resulta curioso comprobar que nadie dentro del sistema cuestiona el dinero y sus procesos, que nadie plantee alternativas, salvo contados grupos de personas que han decidido desprenderse de este yugo y renunciar al control que suponen vivir en una sociedad cada día más controlada, menos libre e inhumana. No debemos esperar demasiado a que esto cambie, ya que la inmensa mayoría de las personas viven engañadas, por tanto, sometidas al sistema. Cumplen sus leyes, pagan sus impuestos y votan en las elecciones amañadas de las falsas democracias, que solo son una ilusión.
El Imperio Británico
fue artífice de una de las peores ideologías concebidas por mete
humana y que dio pie a la situación actual del estado del mundo,
creadora de guerras fratricidas, injusticia, desigualdad y pobreza;
me refiero, por supuesto, al capitalismo. Pero como en todo lo
humano, este imperio no ha sido ajeno a la contradicción. Si bien es
el artífice de esta gran estafa para el mundo, no se puede negar su
capacidad para ser cuna de hombres ilustres,doctos, sabios y
visionarios, con la habilidad de intuir las consecuencias del
capitalismo y prevenirnos de sus efectos. Entre esos hombres nacidos
bajo el yugo de esta paradoja, Tomás Moro fue uno de los mejores
exponentes de lo bueno que ha dado este imperio. Un hombre
ilustre y docto, que como muchos otros de su época, fueron
injustamente acallados por el filo del hacha.
Tomás Moro fue un
visionario porque se anticipó a las consecuencias del capitalismo
mucho antes de que sus consecuencias se vieran claras. Supo ver sus
defectos y como empezaban ha afectar a la naturaleza humana en toda
su extensión. Esta visión la convirtió en una obra literaria que
llamó Utopía. Escrita en 1516, esta obra es calificada por
algunos como los inicios de ciencia ficción, pero los que así la
ven yerran completamente y no son objetivos a la hora de juzgarla
tan a la ligera. La obra en sí, es una crítica descarnada al
capitalismo. Han sido muchos lo que a lo largo de la historia han
visto estas consecuencias, pero al contrario de estos, que solo se
limitaban a la crítica, Tomás Moro plantó una alternativa
científicamente viable, acorde con la ley natural que debiera ser la
máxima que condujese el destino de una sociedad justa.
Más de quinientos
años antes de que nos diésemos cuenta de habíamos embarcado en
una nave condenada al naufragio, Tomas Moro avisó de que estaba
plagada de vías aguas, pero como está ocurriendo hoy en día, muy
pocos le creyeron. Ahora, cuando el naufragio es inminente,
movimientos como Zitgeist, que como el Santo Tomás avisan del
desastre y promueven alternativas similares a las de Utopía, tampoco
son escuchadas. El movimiento Zitgeist actualiza Utopía con los
avances científicos y la tecnología al servicio del hombre y no del
capital. Poniéndose en práctica estas teorías, las seis horas que
se trabajan en Utopía quedarían reducidas a cuatro, en un estado
del bienestar nunca conocido por la humanidad. Pero antes de que
Utopía pueda hacerse realidad, debemos desprendernos de todos los
engaños y tretas que el capitalismo a puesto para ser aceptado como
dogma.
Utopía es la linea
media entre la libertad y el bien común. Uno de los párrafos que
más me ha gustado es el que hace referencia al oro y que tengo a
bien poner aquí:
“Estos
se preguntan, en efecto, si puede haber hombres que queden
embelesados ante el brillo engañoso de una perla diminuta o de una
piedra preciosa, cuando tienen la posibilidad de contemplar una
estrella, y hasta el mismo sol. Se maravillan de que haya alguien tan
rematadamente loco que se considere más noble por la lana más fina
que viste. ¡Después de todo, esta lana, por fino que sea su hilo,
la llevó antes una oveja, y nunca dejó por ello de ser oveja! No
les cabe en la cabeza que el oro, tan inútil por naturaleza, haya
adquirido en todos los países del mundo un valor táctico tan
considerable que sea mucho más estimado que el mismo hombre, y ello
a pesar de que su valor haya sido sacado por y para el mismo hombre.
No salen de su asombro ante el hecho de que un plomo, sin más
talento que un tronco, y tan falto de escrúpulos como zafio, pueda
tener bajo su dependencia a multitud de hombres honrados y buenos
sólo por la única razón de que un buen día le llovieron del cielo
un montón de monedas. Pero, cuidado, que un revés de la fortuna o
una interpretación de las leyes que no menos que la fortuna pone las
cosas patas arriba puede
arrebatar
el dinero a nuestro héroe, para ponerlo en manos del más rufián de
sus criados. Entonces, no hay por qué admirarse de ver al amo
convertido en criado de su criado, como apéndice y aditamento de su
dinero.”
La idea que tenía
Tomas Moro del oro, no dista mucho de nuestro dinero actual, y se
hace patente en este párrafo. Intuyó, no en toda su extensión, la
naturaleza del engaño que hoy en día sufrimos debido al uso del
dinero, derivado de una de las más grandes mentiras creadas
artificialmente para que sigamos en el sistema, la escasez.
Esta idea de escasez
solo es entendida si se considera que todas las cosas inútiles que
hoy en día se producen tiene razón de ser.
¿De que sirve
fabricar diferentes modelos de vehículos, incluso de que sirve
fabricar vehículos existiendo buenos trasportes públicos?
¿De que manera
afecta a un tejido adornos innecesarios para proteger del frío o del
calor?
¿Porqué existen
tal cantidad de refrescos, de diferentes sabores, metidos en botellas
de plástico? ¿Acaso estos pueden ser mejores que el agua de un
manantial puro?
Cosas tan banales
son la causa de la escasez y el dinero es necesario. Es una gran
mentira, una estafa monumental. Si todo el mundo tuviese al alcance
de la mano aquello que realmente necesitase para vivir, el dinero no
tendría razón de existir.
Por otro lado, y
para acabar, tengo que destacar la referencia que éste escritor hace
a las leyes y su origen. Estos dos párrafos pone al descubierto otra
de las causas de muchos males, “La propiedad privada”:
“Por
eso, no puedo menos de acordarme de las muy prudentes y sabias
instituciones de los utopianos. Es un país que se rige con muy pocas
leyes, pero tan eficaces, que aunque se premia la virtud, sin
embargo, a nadie le falta nada. Toda la riqueza está repartida entre
todos. Por el contrario, en nuestro país y en otros muchos,
constantemente se promulgan multitud de leyes. Ninguna es eficaz, sin
embargo. Aquí cada uno llama patrimonio suyo personal a cuanto ha
adquirido. Las mil leyes que cada día se dictan entre nosotros no
son suficientes para poder adquirir algo, para conservarlo o para
saber lo que es de uno o de otro. ¿Qué otra cosa significan los
pleitos sin fin que están surgiendo siempre y no acaban nunca?
Cuando
considero en mi interior todo esto, más doy la razón a Platón. Y
menos me extraña que no quisiera legislar a aquellas ciudades que
previamente no querían poner en común todos sus bienes. Hombre de
rara inteligencia, pronto llegó a la conclusión de que no había
sino un camino para salvar la república: la aplicación del
principio de la igualdad de bienes. Ahora bien, la igualdad es
imposible, a mi juicio, mientras en un Estado siga en vigor la
propiedad privada. En efecto, mientras se pueda con ciertos papeles
asegurar la propiedad de cuanto uno quiera, de nada servirá la
abundancia de bienes. Vendrán a caer en manos de unos pocos, dejando
a los demás en la miseria. Y sucede que estos últimos son
merecedores de mejor suerte que los primeros. Pues estos son rapaces,
malvados, inútiles; aquellos, en cambio, son gente honesta y
sencilla, que contribuye más al bien público que a su interés
personal.”
Todo el que sienta
que algo no funciona en esta sociedad, debería haber leído alguna
vez estos textos, y saber así a cuan temprana edad el capitalismo y
otros ismos, de su misma naturaleza, solo han sido herramientas,
utilizadas por unos pocos, para acaparar riqueza y poder a costa de
los demás. Cabe preguntarse, si estos ismos, son fruto de la
causalidad o la casualidad. Yo más bien me inclino por la primera
opción.
Pongo aquí dos enlaces, uno para el que quiera leer y otro para el que lo quiera escuchar.
La industria del
cine en Hollywood mueve millones de dólares, pero puede que ganar
dinero no sea el único motivo para la producción de películas. De
hecho, la mal llamada piratería en Internet combinada con los
homecinemas, está haciendo que producir películas sea cada vez
menos rentable.
Así pues ¿Que hace
posible seguir haciendo grandes producciones con presupuestos
desorbitados?
“El
francotirador” o “La noche más oscura” o “Argo” nos
enseñan que el fin, por muy inhumano que sea, justifica los medios.
Estas tres producciones americanas, entre otras muchas, parecen
hechas por encargo del gobierno, con el fin de cambiar a la opinión
pública respecto actos claramente despreciables y que van en contra
de todo derecho humano. Así mismo justificar la nefasta política
exterior americana. En la película “El Francotirador”, se nos
muestra un anti-héroe muy patriótico él, que dispara a distancia,
sin dar la oportunidad de defenderse al enemigo, que siempre, como no
podría ser de otra manera en una película patriótica, es un
terrorista supermalvado, que en ocasiones se personifica en
mujeres e incluso niños. Lo que la película no cuenta, es que las
personas que este supuesto héroe mata, no son terroristas porque sí.
Son personas que intentan defenderse de una invasión extranjera y
no salvajes despiadados sin alma.
De esta forma,
contando una historia simple y sin complicarse mucho la vida, Clint
Eastwood, un tipo que hasta que hizo esta película lo consideraba un
buen director y más inteligente, nos intenta convencer de que matar
preventivamente y de forma cobarde está justificado. Entra dentro
de lo posible, que como ha sucedido en otras ocasiones, Jason Hall,
el guionista de esta película, fuese instado a contar esta historia
por la C.I.A. No sería ni la única ni la primera vez que este
organismo interviene para ensalzar el patriotismo o crear pautas de
conducta sociales o justificar las políticas americanas. Curiosamente, al igual que pasa con algunos premios Novel, estas autenticas bazofias de guión simplista y poco trabajado, son galardonadas con Oscars, que yo calificaría como premios al cinismo y la hipocresía.
En segunda la
película “La noche más oscura” , una película premiada por la academia, se evidencia de forma mucho
mas clara esta realidad. Es pura propaganda disfrazada película.
Recrea burdamente la captura de un terrorista, que por cierto, fue
creado por la propia CIA, me refiero, claro está a Osama Bin Laden. A
parte de falsear la verdad de forma descarada, justifica y de que
manera, que la tortura física y psicológica está bien para obtener
información, como un mal necesario.
Estas dos películas
quieren hacernos creer que todos los que matan son terroristas, y
que la administración americana es la hermanita de la caridad que
viene a salvarnos de estos salvajes. Pero los hechos, al margen de la ficción de la que no se apartan las películas, apuntan
a otra verdad. La propia administración de Obama es, a día de hoy,
la que ejerce y promueve el terrorismo en todo el mundo. No solo lo
financia directamente a través de sus agencias secretas, sino que con
sus políticas imperialistas e injerencias constantes en países con
recursos, lo fomenta.
¿De que otra manera
puede defenderse un país que no tiene ni armamento ni los medios de
su adversario?
Por otra parte, no
se le puede llamar otra cosa que terrorismo, a lo que sus drones
hacen todos los días en Pakistan, Yemen y otros tantos países.
Donde personas, muchas veces ajenas a cualquier acto criminal, por
tanto inocentes, muren a voluntad de las órdenes de ejecución
firmadas por Obama. Incluso, aunque fuesen terroristas, toda
persona tiene derecho a un juicio justo, algo que está en la
declaración de derechos del humanos y en la propia Constitución
Americana. Son películas como estas, las que intentan socavar
nuestro subconsciente, condicionando nuestra forma de ver las cosas.
Pero claro, de todo
esto surge una duda respecto a aquellas películas que dejan entrever
una realidad plausible, sobre tramas políticas reales urdidas en
el seno del gobierno americano y que han sido éxitos
cinematográficos. Pero éstas, la tramas acaban casi siempre siendo
descubiertas y los conspiradores atrapados, dando así la impresión
falsa que todos los malos acaban pagando sus fechorías. Todos
sabemos que esto es falso, pero en las películas no lo pintan así,
dándonos a entender que hay una justicia real; esa es la idea. Pero,
si fuese así, Dick Cheney, George Bush y todos los que mintieron
sobre las armas de destrucción masiva de Iraq, estarían en la
cárcel, cosa que no ha sucedido.
Si pensamos que va a
llegar Morfeo para ofrecernos la pastillita, es qué o que los
indios americanos ganaron a los blancos en la conquista de su
territorio, como en Avatar, es que estamos abducidos por la
industria Hollywoodiense y su manipulación de la realidad. Puede
que Matrix sea una de esas películas que deja entrever la verdad,
pero para verla, no es necesario tomar ninguna pastilla, es una
cuestión de decidir cual es la verdad y no dejarse engañar por
encantos de sirena de Hollywood.
El cine, como los
medios de comunicación son pagados por un sistema, cuyo propósito,
es el control a las masas y sometimiento del individuo al pensamiento
único y disciplinado, condicionando sus elecciones y gustos. Tanto
la educación como la posterior manipulación mediática, son en si
mismas una extensa red para atrapar en el inmovilismo a la especie
humana. Hollywood forma parte integrante de esta red.
Si te gusta el cine
por sus efectos especiales, la espectacularidad y la fuerza de la
imagen, tienes que tener cuidado de no dejarte influenciar por los
mensajes subliminales de las películas. No encontraras en la vida
real a un Superman que te salve, el único que puede salvarte de la
mentira y del sometimiento eres tu mismo. El auténtico superhéroe,
es aquél que va en contra de la corriente y piensa por si mismo.
Comparto este vídeo como ejemplo de gente que piensa lo mismo que yo.
Hoy ha sido uno día
tranquilo al que podido dedicar tiempo para leer. Como no sabía el
qué, me puse a buscar algo entretenido. Por casualidad cayó en mis
manos este texto del Marqués de Sade y que quiero compartir. Tengo que decir que no
solo me ha hecho reír, sino también comprender mejor la fuerza de
las palabras. Sé que para muchos esto les parecerá una obviedad,
pero para mí, todavía falto de cultura y de lecturas complicadas
este texto me ha parecido todo un descubrimiento, sobre todo por ver como personas
diestras en letras pueden narrar una historia tan escabrosa sin
utilizar ni un solo término soez; esto me ha resultado muy didáctico.
Creo entender que la intencionalidad de este texto, que
califico como satírico, es una dura crítica contra la iglesia y su hipocresía,
así como los más bajos instintos, pero juzgar vosotros. Sin más lo dejo para disfrute
del que quiera leer.
De todas las
ciencias que se inculcan a un niño cuando se trabaja en su
educación, los misterios del cristianismo, aun siendo sin duda una
de las materias más sublimes de esta educación, no son, sin
embargo, las que se introducen con mayor facilidad en su joven
espíritu. Persuadir, por ejemplo, a un muchacho de catorce o
quince años de que Dios padre y Dios hijo no son sino uno, que el
hijo es consustancial a su padre y que el padre lo es al hijo, etc.,
todo esto, por necesario que sea no obstante para la felicidad de la
vida es más difícil de hacer comprender que el álgebra y cuando se
quiere tener éxito, uno se ve obligado a emplear ciertas
equivalencias físicas, ciertas explicaciones materiales que, por
desproporcionadas que sean, facilitan, sin embargo, a un muchacho la
comprensión de la misteriosa materia.
Nadie estaba tan
plenamente convencido de este método como el padre Du Parquet,
preceptor del condesito de Nerceuil, que tenía unos quince años de
edad y el rostro más hermoso que fuera posible contemplar.
- Padre -decía
día tras día el joven conde a su preceptor-, de verdad que la
consustancialidad está por encima de mis fuerzas, me es
absolutamente imposible concebir que dos personas puedan convertirse
en una sola: aclaradme ese misterio, os lo suplico, o ponedlo al
menos a mi alcance.
El virtuoso
eclesiástico, deseoso de tener éxito en su educación, contento de
poder facilitar a su discípulo todo aquello que un día pudiera
hacer de él un hombre de provecho, ideó un procedimiento bastante
satisfactorio para allanar las dificultades que hacían cavilar al
conde, y este procedimiento, tomado de la naturaleza necesariamente,
tenía que resultar bien. Hizo venir a su casa a una jovencita de
trece a catorce años y tras asesorarla convenientemente la unió a
su joven discípulo.
Y bien -le
pregunta-, amigo mío, ¿entendéis ahora el misterio de la
consubstancialidad? ¿Comprendéis ya con menos dificultad que es
posible que dos personas se conviertan en una sola?
-Oh, Dios mío,
claro que sí, padre -responde el encantador energúmeno-; ahora lo
entiendo todo con una facilidad sorprendente. No me extraña que ese
misterio constituya, según se dice, toda la alegría de los seres
celestiales, pues es agradabilísimo divertirse haciendo de dos uno
solo.
Algunos días
más tarde el joven conde rogó a su preceptor que le diera otra
lección, pues pretendía que había aún algo en el misterio que no
comprendía bien y que no podría explicarse más que celebrándolo
una vez más en la forma en que ya lo había hecho. El complaciente
clérigo, a quien esta escena divertía probablemente tanto como a su
alumno, hace volver a la muchachita y la lección vuelve a empezar,
pero esta vez el clérigo, singularmente emocionado por el delicioso
panorama que ofrecía a sus ojos el guapo muchacho de Nerceuil
consubstanciándose con su compañera, no pudo resistirse a
intervenir en la explicación de la parábola evangélica y las
bellezas que con ese motivo recorren sus manos acaban por inflamarle
totalmente.
Me parece que
esto va demasiado de prisa -exclama Du Parquet, agarrando al
condesito por la cintura-, excesiva elasticidad en los movimientos,
por lo que resulta que no siendo tan íntima la conjunción no
refleja adecuadamente la imagen del misterio que hay que demostrar
aquí... Si nos ponemos, exacto de esta forma -prosigue el pícaro,
obsequiando a su joven discípulo con lo mismo que éste ofrece a la
muchacha.
¡Ah! Dios mío,
¡que me hacéis daño, padre! -exclama el muchacho-. Y además esta
ceremonia me parece inútil. ¿Qué otra cosa me enseña sobre el
misterio? -¡Oh diablos! -contesta el eclesiástico, balbuceando
de placer-. ¿Pero no ves, amigo mío, que te lo enseño todo de una
vez? Esto es la Trinidad, hijo mío… Hoy te estoy explicando la
Trinidad, cinco o seis lecciones más y serás doctor de la Sorbona.
La dirección
auto-destructiva de la sociedad no es producto de la casualidad, sino
de la intencionalidad. Durante mucho más tiempo del que pensamos,
la élite política y financiera, fundamentalmente está última,
con la colaboración de unas instituciones educativas sordas, ciegas
y obedientes, han conseguido idiotizar la sociedad hasta hacer que
esta permanezca impertérrita ante un peligro que ya no es capaz de
ver. Gracias a la ingeniería social capitalista, de Keynes y demás
predicadores y charlatanes del materialismo más radical, la
educación, como todo lo humano, ha tomado un rumbo de inexorable
caída hacia el clasismo y la decadencia. La diferencia entre la
educación común y la de los hijos de los oligarcas es abismal. Pero
ni siquiera la clase pudiente se salva de la quema en estos tiempos
de oscuridad. De la misma forma que se conduce a un obrero a su
destino, se educa a la clase pudiente a ocupar su estatus en la
cadena de mando, con la clara intención de prevenir posibles fugas
en el sistema de jerarquías, tan bien planificado como
deshumanizado.
Como he dicho antes
y me reitero, esto no es fruto de la casuística, esta educación se
ha diseñado y puesto en funcionamiento con intencionalidad y
alevosía; podría decir sin temor a equivocarme, que se trata de
una de las conspiraciones más evidentes de todas las que hay.
Los motivos por los
que se ha idiotizado a la sociedad se hacen patentes en las
elecciones o en cualquier encuesta sobre política. Julio Anguita,
con el que comparto algunos pensamientos, dijo en uno de sus
discursos recientes dijo: A los que más temo no son a los
neoliberales, sino a los que dicen que pasan de política y no acuden
a las urnas o votan siempre a los mismos, aunque estos les roben o
les perjudiquen. Julio no habló del porqué sucede esto, pero
conociendo el nivel cultural y la educación recibida por esta
generación de pasotas instrumentales, es fácil intuir la causa de
su temor.
Julio Anguita, como
otros políticos de la vieja escuela, son hombres cultos. Hoy en día,
tener cultura, utilizar palabras antiguas o retórica, más o menos
culta, es casi tanto como ser un bicho raro. No hace demasiado tiempo
intelectuales y poetas se reunían en los cafés de las ciudades para
discutir, no solo de política, también de arte y de cultura en
general, casi de la misma forma que lo hacían los senadores en Roma
o la antigua Grecia. Si comparamos aquellas mentes elocuentes y
claras con lo que hoy podemos escuchar en cualquier bar, nos daremos
cuenta enseguida de nuestra pérdida.
En menos de
cincuenta años, hemos pasado de tener convicciones morales a ser
amorales, de cuidar a nuestros hijos a ceder su porvenir a una
sociedad enferma y decrépita, de tener universidades independientes
a universidades que trabajan para crear engranajes y piezas para
sostener un sistema absolutamente perecedero. Las Universidades ya no
forman personas, forman máquinas.
Enfrentarse al
peligro es de valientes, pero ignorarlo es de idiotas. El peligro que
se cierne sobre esta sociedad sociedad, que a renegado de su
historia, de la cultura y del conocimiento, es la sumisión al
totalitarismo. Un individuo sin capacidad crítica, incapaz de
percibir el peligro, incapaz de reconocer lo que significa la
libertad, es permeable a todo tipo de engaños que provengan del
poder, algo que cada vez se hace más patente.
Quien controla la
educación de un pueblo tiene en su mano el futuro de éste, y se da
el caso que nuestro futuro está en manos de unos irresponsables,
incapaces de ver el resultado de una sociedad empobrecida, incapaz de
rebelarse ante el poder. Que fácil va ha ser para futuros déspotas
hacerse con el control de una sociedad desprovistas de armamento
intelectual para defenderse.
Hoy nos resulta muy
normal mirar al cielo y observar más de tres aeronaves surcando los
cielos. Las prisas que imponen los tiempos han hecho que este medio
de trasporte prolifere de forma desbocada. Se estima que en
cualquier momento hay volando, de media, unos 13.000 aparatos, una
cifra que no para de crecer por el aumento de demanda y el fomento de
una industria a todas luces insostenible y sin futuro. A estos hay
que sumar los aparatos dedicados al transporte de mercancías y
otros militares. Juntos podrían sumar de 14.000 o 15000.
El Boing 737-400,
uno de los aviones más populares, carga en sus depósitos 20.104L de
combustible y tiene una autonomía aproximada de 3810Km, volando a
una velocidad de crucero de 840km/h y transportando hasta 168
pasajeros. Si tomásemos este aparato como como modelo para hacer un
estadística del consumo de combustible que se consume cada hora por
todas las aeronaves del mundo, las cifras nos abrumarían. Por poner
burda aproximación y no entrar mucho en cifras: cada hora se
queman en la atmósfera una media de 8.000 toneladas de
combustible, lo que representa en un año más de 30 millones; una
cifra absolutamente insoportable para una atmósfera ya dañada por
otras industrias y actividades humanas. Por mucho que mejore la
eficiencia de los motores a reacción, está claro que esto no puede
durar mucho. El oxígeno que queman estos motores es el mismo que
respiramos, y todo por llegar más rápido y más lejos, en unos
tiempos donde esto se puede hacer de otras formas.
Existen proyectos
que superan en velocidad y economía al transporte aéreo. Uno de
esos proyectos es el tren que se mueve dentro de un túnel de vacío.
Levitado por electroimanes. Este tren de trasporte de pasajeros o
mercancías no tendría ante si lo que hace que un cuerpo necesite
grandes cantidades de energía para moverse; el aire, por lo que
podría alcanzar velocidades superiores a 10.000k/h gastando un 1% de
lo que consume una aeronave o un barco. Además, la energía podría
provenir directamente de fuentes sostenibles, pues no consumiría
combustible, sino electricidad. Cierto que la inversión necesaria
para construir las infraestructuras necesarias para hacerlo posible
supondrían una enorme inversión ¿Pero acaso no supone más coste
para nuestra supervivencia quemar cada año 30 millones de litros de
combustible en la alta atmósfera? Si dicha infraestructura se
pusiese en marcha, dejaría la industria de la aviación obsoleta y a
los intereses petroleros que la fomentan arruinados. Así pues, no es
que no haya alternativas, es qué hay intereses que impiden ponerla
en práctica. Estos túneles se podrían construir encima de las
líneas de tren ya existentes, o atravesando los océanos. Gracias a
los avances en la aeronáutica y la tecnología espacial, hoy en día
es posible construir estas infraestructuras dotándola de medidas de
seguridad similares a las que tiene las aeronaves más modernas.
Lamentablemente, es falta del incentivo económico lo que lo evita,
algo que la industria aeronáutica y petrolera todavía tienen,
aunque tenga los días contados.
Tendríamos que
plantearnos seriamente cuando es necesario o no hacer un vuelo en
una línea aérea; porque puede que sea más un capricho que no una
necesidad. Internet y las telecomunicaciones en general, hacen
posible reuniones virtuales e incluso le permiten a un cirujano hacer
una operación desde el sillón de su casa. Los viajes, que
enriquecen nuestra cultura y conocimiento sobre el mundo, siempre se
disfrutan más cuando vamos lentamente, pudiendo parar en aquellos
sitios que nos resulten interesantes y tomándonos el tiempo que sea
necesario para ello. El camino en sí es el verdadero aprendizaje y
mayor es la experiencia cuanto más lento. Siempre podemos parar y
apartarnos del camino para aprender más de los sitios donde
pasamos. Entonces ¿Porqué elegir un medio de transporte en el que
no podemos más que esperar la llegada? Es la cultura de lo
inmediato, del placer instantáneo que nos han inculcado, lo que nos
lleva a elegir viajar rápido. La falta de tiempo por tener que estar
esclavizados con el reloj y los pocos días disponibles para hacer
auténticos viajes.
Siendo sincero,
tengo que decir que me resulta casi doloroso escribir este porst,
porque desde pequeño anhelé ser piloto y dominar los cielos con
uno de estas maravillas de la tecnología aeronáutica, y aunque en
parte cumplí ese sueño volando con ULM y en parapente, por mis
circunstancias personales nunca pude conseguirlo. Solo pude
conformarme con los simuladores de vuelo, como X-plane, un simulador
capaz de recrear y poner a mi alcance la experiencia de pilotar una
aeronave como un 747 sin salir de mi habitación. Se que solo es un
sucedáneo, pero se parece mucho a la realidad. Después del tiempo
recorrido y de los muchos viajes que he realizado, puedo afirmar que
de todas las experiencias, las mejores fueron a la velocidad que mis
piernas me daban, haciendo el camino de Santiago o en mis excursiones
por los bosques del Pirineo, cuando era más joven. Cada paso fue una
experiencia. No puedo decir lo mismo de las largas esperas en los
aeropuertos, ni de esos vuelos de poca duración, una emoción propia
del comienzo que se queda en nada.
La industria del
transporte aéreo, al menos hasta que existan otras tecnologías más
limpias, son, concluyendo, algo que debería de limitarse a lo
estrictamente necesario. No es sostenible y perjudica al medio
ambiente. Los más beneficiados de su abuso son las multinacionales
del petróleo, que lo están promocionando, solo buscan el beneficio
de los inversores a costa de nuestro perjuicio. A la hora de viajar,
tendríamos que pensarlo dos veces, no solo si nos reporta algún
beneficio, sino lo que estamos haciendo a generaciones venideras.
Advierto que este está dividido en tres partes y mezcla tres temas diferentes, aunque
relacionados entre si, el primero Chentrails.
En primer lugar
quiero hablar de los conocidos como Chentrails, las estelas que dejan algunos
aviones y cuyo comportamiento, según mucha gente, no obedece a lo que sería una estela
de condensación normal.
Existen
teorías que afirman que se trata de una fumigación a gran escala
con objetivos tales como control mental, crear enfermedades y otras teorías, en principio descabelladas. Otras, más creíbles creo
yo, aluden a la existencia de algún tipo de programa para controlar
el clima terrestre o modificar la atmósfera. En este aspecto cabe señalar que existen
patentes registradas con este fin, lo que le da un grado de
verosimilitud al asunto. De todas formas, es muy aventurado sacar
conclusiones sin antes acudir a la ciencia para saber si la
generación de estas estelas es posible, si son el efecto que cabe esperar del vuelo de una aeronave a reacción.
Tanto las estelas
de condensación que permanecen en los cielos escasos segundos como
las que permanecen varias horas son científicamente explicables y no
parece, a priori, algo extraño e inexplicable. La ciencia nos dice
que la combustión de los motores y los cambios de presión que
producen las alas de una aeronave generan vapor. Éste, al entrar en
contacto con el aire frío de la atmósfera se condensa en pequeñas
gotas de agua, que a partir de cierta altura, dependiendo de la
presión atmosférica y de la humedad, puede formar pequeños
cristales de hilo. Hay que tener en cuenta que son precisamente de
pequeños cristales de hilo de lo que están formadas las nubes que vemos habitualmente en el cielo y
las vemos como normales aunque permanezcan también mucho tiempo en el cielo sin disiparse o cambiando de forma y de color.
Descartado el fenómeno como algo extraño, además, hay que tener en cuenta la infraestructura necesaria para
poner en marcha un programa de fumigación o cambio climático es algo muy difícil de asumir, diría yo que casi imposible. El
gran número de instituciones, tanto gubernamental como de
control de aviación civil y gobiernos de diferentes países, que deberían ponerse de acuerdo para que estas operaciones, hacen que muy poco probable el hecho de una conspiración a gran escala. Sabemos que los gobiernos no se ponen de acuerdo ni en las cosas más sencillas, así que me extrañaría mucho que estos tuviesen conocimiento o colaborasen en esta oscura empresa. Otra cosa sería, que no fuesen los gobiernos, sino otro tipo de organización al margen de estos. Sabemos a ciencia cierta, que las multinacionales si saben ponerse de acuerdo, sobre todo si hay algo que ganar, y cuando lo hacen no tiene miramientos con la población u terceros países. Si suponemos, aunque sea difícil, que este enorme y complejo complot estuviese en marcha ¿No sería de esperar que alguien, algún
piloto, mecánico o funcionario hubiese dado la voz de alarma?
Ahora bien, si se trata de otros tipos de organización, podrían disponer de aeropuertos privados y otros medios no controlados por ningún gobierno, en cuyo caso, sería posible la existencia de vuelos no controlados.
Dicho todo esto y a
pesar de los indicios, no puedo afirmar con seguridad que no o no posible. Otras conspiraciones se han descubierto mucho tiempo después, y aunque parecían imposibles de realizar, existieron y están documentadas.
ahora quisiera explicar algo que yo he podido ver con mis propios ojos, cosas que no son normales, bajo ningún punto de vista y que cambiaron mi opinión sobre esto de forma definitiva. He visto como dos aeronaves que dejaban estelas
sospechosas y hacían maniobras y giros anormales no eran controladas por tráfico aéreo. Pude comprobar que dichas aeronaves no
tienen transpondedor y no aparecen en los registros de vuelos
comerciales gracias a una página web, y la verdad es que quede estupefacto.
Hace poco, como dije, descubrí una página web que promociona una
aplicación muy interesante, http://planefinder.net/.
Esta página ofrece información en tiempo real de todos los vuelos
del mundo, así como datos relativos a la ruta, velocidad, altura,
identificador del vuelo e incluso una imagen del modelo del avión.
Con ella se puede saber en tiempo real que tipo de avión tienes a la vista en
cielo. Se dio la casualidad que yo estaba entretenido con esta
aplicación, observando el cielo e identificando los vuelos, así
como me maravillaba lo que hacen los controladores para dirigir
las naves al aeropuerto, poniéndolas en perfecta fila india. El cielo estaba claro, y los aviones que pasaban no dejaban ninguna estela
apreciable, porque la altura a la que estaban volando estaba por debajo de los 10.000pies. Todos los que pude identificar estaban realizando la aproximación o acaban de despegar para ascender a su nivel de vuelo. Entonces me vi que dos aparatos volando a gran
altitud, por el tamaño deducí que a más de 30.000pies, unos 9000m. No los hubiese visto de no empezaban a dejar una estela justo cuando pasaban encima
de la localidad donde estaba. Misteriosamente, ninguno de los dos aparatos
figuraba en mi aplicación y no lo hicieron en ningún momento
mientras fueron visibles ni después de que saliesen de mi campo de visión. Uno de ellos hizo dos giros de
40º antes de desaparecer, algo completamente ilógico si se
hablamos de en términos de ahorro de combustible y menos aun teniendo en cuenta la altura a la que estaban, donde esos giros solo suponen consumo extra de combustible; era completamente innecesario y parecía querer
seguir el perfil de la población donde estaba. Sus trayectorias y
rumbos, como pude comprobar mas tarde, no coincidían con ninguna ruta
aérea conocida.
Este hecho, como es normal, me ha creado mucha
incertidumbre y ya no estoy seguro de lo que me dice la ciencia y la
lógica, porque es inexplicable. hasta el momento, lo estoy investigando, desconozco si
los vuelos militares tiene transpondedor o operan en otras
frecuencias que no aparecen en los registros de aviones comerciales.
Lo que está claro es que, al menos, los controladores aéreos
tendrían que estar notificados de estos vuelos fantasma. Este hecho me ha acercado más a los que opinan que existe un complot. Desconozco que intenciones hay detrás de esto, lo que estoy seguro es que lo que he visto es cierto y que algo que no entiendo. Alguien debería explicar porqué hay aeronaves no identificadas en los cielos sobrevolando nuestras poblaciones, ya solo por la inseguridad que crea tener aparatos desconocidos encima de poblaciones.
Y bueno, hasta aquí la
primera parte de este post. En el siguiente me cuestionaré la existencia misma del transporte aéreo de
mercancías y personas, si merece la pena gastar tanto petróleo y
recursos para acortar los tiempos y el coste real para la tierra de
esta industria.
Nota, la imagen no corresponde al momento de la toma, solo es un ejemplo de como funciona la aplicación http://planefinder.net/. En el momento que detecté el evento al que hago referencia y que es completamente verídico, estaba con el móvil y me fue imposible hacer una captura de pantalla. Es por eso que no pongo la imagen correspondiente al momento.
No me cabe en la
cabeza y mucho menos en el corazón, que existan personas, que
valiéndose del falso anonimato que proporciona Internet, manifiesten
alegría o celebren la muerte de otro ser humano, sea éste de la
nacionalidad que sea o las circunstancias que envuelven su vida.
Considero a estas personas igual que consideraría a un asesino y
como tal, pienso yo, que deberían ser tratadas, no solo por sus
pensamientos, sino por la cobardía que demuestran escudándose en el
anonimato para hacer este tipo de manifestaciones.
Aunque soy un firme
defensor de la privacidad en Internet, considero que hay muchos casos
en que la privacidad debería tener límites. Especialmente para
estas personas, que insultan, faltan al respeto o hacen
manifestaciones de índole xenófobo, como es el caso. Por supuesto,
el levantamiento de la privacidad debería ser siempre mediante
orden judicial. Pues es muy fácil aprovechar, como se ha hecho ya en
algunas ocasiones, este tipo de incidentes aislados para criminalizar
Internet y su privacidad. Son este tipo de hechos los que han servido
como escusa para eliminar la figura del juez en una intervención
policial o del estado para acceder a los datos de los usuarios de
forma ilegítima, cosa que marca la diferencia entre un estado
totalitario y uno democrático.
No estoy seguro de
cual es la motivación que mueve a esta gentuza a hacer comentarios
tan deleznables e inhumanos. Tampoco sé si son lo suficientemente
estúpidos como para no darse cuenta que lo que provocan es agudizar
el sentimiento nacionalista; porque esto es exactamente lo que han
provocado, justo cuando este sentimiento estaba empezando a menguar.
Ahora bien, y aquí es cuando algunos me dirán paranoico, puede que
los autores de estos comentarios no sean descerebrados, sino más
bien todo lo contrario. Cuando alguien comente una acción, siempre
hay que preguntarse a quien beneficia. Ello nos puede dar una buena
pista de la autoría. El beneficio, por muy mal que siente lo que voy
ha decir, lo recibe el movimiento nacionalista separatista catalán.
¿Que gana un nacionalista español haciendo estos comentarios?
Absolutamente nada, más bien todo lo contrario, pierde el cariño
de los catalanes y aumenta su sentimiento de odio. En pocas palabras:
A río revuelto, ganancia de pescadores.
Es por ello que
espero que se conozcan las identidades de los autores de los
comentarios, sean quienes sean y que rindan cuenta a las familias de
los afectados por ello; me da igual quienes sean. Estos actos no
deben quedar impunes.
Aprovecho este post
para dar mis más sinceras condolencias a los familiares de los
caídos en este brutal accidente. Sé que una muerte inesperada trae
consigo mucho dolor y sueños rotos. No me importa su nacionalidad o
condición, son personas, como todos los que mueren en trágicos
accidentes son seres humanos que han visto perder a sus seres
queridos en un instante, sin tiempo a prepararse, lo que multiplica
su dolor y su pena. Siento una profunda pena por aquellos que
utilizan el dolor ajeno para regodearse y ahondar en el odio. Menos
mal que el karma siempre pone las cosas en su sitio.
Lo que aquí cuento
es un testimonio de alguien que mantendré en el anonimato por
razones obvias, de la misma forma que no daré demasiados detalles
para no comprometer a la persona que me lo contó.
Después de
atravesar la ostentosa puerta del cortijo del es-torero, recorrimos
varias hectáreas de terreno por un camino bien arreglado para llegar
finalmente a un caserío, tan ostentoso y grande como lo que había
visto hasta el momento. Ya antes de que me lo propusieran tenía
muchas dudas sobre las razones por las que por las que debíamos ir
a un sitio tan alejado de lo que yo pensaba que debía ser un lugar
para presentar mi proyecto.
Ya en el lugar, lo
primero que me llamó la atención fue ver hombres casi ancianos con
jovencitas sacadas de revistas de moda, que bien podían ser sus
hijas. Vestidos caros, bolsos de marca y coches de lujo aparcados en
el jardín. Era un ambiente distendido y había mucha gente del
señorío. Efectivamente, pude reconocer políticos, miembros o
relacionados con la junta. Mí conseguidor, él que luego me
traicionaría como un vil gusano y el artífice de aquella extraña
excursión, me dijo que si quería podía presentarme a algunos de
esos personajes tan importantes, incluso hacerme fotos con ellos,
eran hombres poderosos que podrían abrirme muchas puertas en el
futuro a cambio de favores.
Para mí todo
aquello era nuevo, no entendía que para negociar mi entrada en el
proyecto tuviese que meterme en aquellos berenjenales, tan distantes
de lo que yo esperaba. Lo normal, pensaba yo, hubiese sido una oficina,
presentar mi proyecto ante expertos y financieros, pero todo
aquello no tenía nada que ver con lo técnico, aunque si mucho con las finanzas, pero no las que imagináis. Dudo mucho que
alguien de los que andaban pavoneándose por allí tuviese idea de lo
que yo ofrecía ni como lidiar con ello.
Lo hacía toda aquella gente allí dejó de ser un misterio cuando pude escuchar parte de
algunas conversaciones. Comprendí que allí se
negociaba cómo se repartirían el dinero que venía de las
subvenciones europeas en proyectos, que podían ser solo simples fachadas y
papeles sin nada tangible, solo justificantes del reparto.
Mi
proyecto era uno de ellos, pero no era algo intangible. Los informes
y el tiempo que tardé en redactarlos estaba sostenido por un duro
trabajo de documentación y preparación, tanto a nivel técnico como
estudio de campo, en el que invertí muchas horas. Todo el proyecto,
el esfuerzo de ese duro trabajo fue entregado a mi conseguidor con la
esperanza de un éxito que no llegaría nunca. Confié
ingenuamente en el él dándole el contacto de mis proveedores y toda la documentación.
Después de pasar un
tiempo descubriría con impotencia, que todo mí trabajo había sido
literalmente robado. Mi conseguidor se había apropiado del mismo
poniendo el logo de su empresa en los pie de página. Lo presentó como suyo, quizás
sirviendo de justificación para el reparto de comisiones, no lo sé.
Así es como se las
gastan por allí y lo que te pasa cuando antepones la confianza a los
contratos en los negocios.
Este hecho es
relativamente reciente y buena parte del señorío del cortijo ha
sido votado, nuevamente, por los electores de una comunidad autónoma
que parece secuestrada por una casta política corrupta. Yo me
pregunto: ¿Si el nivel de corrupción es tan alto, debo de creerme
el resultado de las elecciones? ¿Es la gente tan sumamente idiota
que es capaz de votar a los mismos que le roban su dinero una y otra vez? Creo que no se dan cuenta que el dinero que están robando es el suyo. Quizás, cuando
uno de esos votantes vayan por la carretera y por culpa de un bache tenga un accidente, puede que se de cuenta que el dinero que iba destinado a arreglarla ha acabado en manos de uno de estos que tan alegremente a vuelto a elegir.Y ya no me refiero a unos o a otros, sino a los dos partidos mayoritarios, que para mí son la misma basura con diferentes siglas.